Obispos de la Comisión Episcopal de Pastoral Social y líderes sindicales de todas las centrales obreras mantuvieron este lunes una reunión en la que analizaron la situación económica del país y el cuadro laboral a partir de los despidos en el sector público y privado. Los prelados y los gremialistas también dialogaron sobre el impacto de la inflación y el avance del narcotráfico.
Al llegar a la sede de la CGT Azopardo, donde se desarrolló el encuentro, el titular de la CGT Alsina, Antonio Caló, se mostró «preocupado» por las subas de precios y tarifas y dijo que las medidas sociales anunciadas el sábado por el presidente Mauricio Macri «son paliativos, pero no alcanzan».
El metalúrgico informó que en la reunión con los representantes de la Iglesia Católica, entre los que se encontraba monseñor Jorge Casaretto, se conversó sobre la situación de pobreza del país.
En tanto, Hugo Yasky, secretario general de la CTA, se quejó de que desde el Gobierno «están haciendo que los salarios estén cada vez más retrasados y que las familias no lleguen a fin de mes».
Sobre las medidas anunciadas el sábado por el presidente Mauricio Macri, consideró que se «avanza en el sentido correcto, pero es insuficiente».
Asimismo, el titular de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo, señaló los temas que preocupan al sector y tildó de «exiguo» lo prometido por el gobierno de Cambiemos para paliar la situación social.
En la reunión con monseñor Jorge Casaretto, emérito de San Isidro, y Fernando Maletti, de Merlo-Moreno, entre otros obispos de la Pastoral Social estuvieron presentes también Hugo Moyano (CGT Azopardo), Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA) y Omar Plaini (Canillitas).
