La tarifa social de la luz, se ofrece a quienes consuman 150 kilovatios hora por mes, y quienes califican pagan $14 por mes para un consumo de 83 KwH y $43 por uno de 201 KwH mensuales, con impuestos incluidos.
Con la tarifa social del gas, por ejemplo, en Buenos Aires se paga $48 en lugar de $131, y en Córdoba $77 en vez de $253.
Luego de acompañar al presidente Mauricio Macri en la presentación del Programa RenovAr, en el barrio porteño de Villa Lugano, en diálogo con la prensa, Aranguren destacó que «el valor absoluto de la boleta es importante», en referencia a los aumentos de tarifas que ya llegaron a los hogares, pero remarcó que «hay que tener en cuenta el valor relativo de esa boleta, que se obtiene en función del lugar, de cómo era la tarifa antes, y de cuál es el precio en otras partes del país».
«Todo tipo de preocupación que exista nosotros la vamos a canalizar. Vamos a tratar de resolver los problemas a medida que van apareciendo», afirmó el ministro.
Aseguró que «es una necesidad haber recompuesto las tarifas», porque explicó que «caso contrario, íbamos a seguir deteriorando la situación y la inversión no iba a estar disponible para lograr disminuir los cortes de energía eléctrica y de gas».
El funcionario explicó que «se decretó la crisis energética en diciembre último hasta diciembre de 2017», y puntualizó que «el objetivo es ir mejorando poco a poco».
De todos modos remarcó que «no hay certeza de que no vaya a haber cortes», y sostuvo que «hay que asegurar que la calidad del servicio eléctrico mejore y que la cantidad de cortes disminuya».
«Eso nos llevó a diversificar las fuentes de abastecimiento: ayer comenzó a recibirse gas desde Chile como una fuente de abastecimiento adicional a lo que es Bolivia y a la importación de GNL a través de barcos», destacó el ministro, quien anticipó que «dentro de dos semanas se recibirán ofertas por energía térmica también por una licitación de mil megavatios de potencia».
Fuente: Telam