Antes de hacer efectiva su renuncia apenas pasadas las 19 de Roma, el ahora ex premier participó de la reunión de dirección del Partido Democrático (PD) del que será siendo secretario general, donde pidió «darle una mano al presidente de la República a cerrar la pagina de la crisis».
Renzi, de 41 años y en su cargo desde febrero de 2014, formalizó así la decisión que había adelantado en la noche del domingo y que por pedido de Mattarella había congelado hasta que se aprobara la ley presupuestaria para el año próximo, votación que el oficialismo ganó este miércoles por 173 votos a 108 en la Cámara alta.
Tras un encuentro de casi 40 minutos este miércoles, un comunicado de la Presidencia ratificó que Renzi formalizó su renuncia y anunció que mañana desde las 18 de Italia, el jefe de Estado «iniciará las consultas» para formar un nuevo gobierno que como primer objetivo apruebe una ley electoral que permita un llamado al voto.
La nota de Presidencia agrega que Mattarella le solicitó al ahora ex premier que se mantenga de forma interina mientras duren las consultas para la administración de las obligaciones corrientes.
En su discurso frente a al dirección del PD, un Renzi con poca imagen de retirado de la actividad política, repasó algunos logros de sus 1019 días en el gobierno, recordó que su fuerza aún conserva la mayoría en ambas cámaras y pidió a sus seguidores «reflexionar sobre qué significa ser un partido mayoritario en este sistema».
De cara a la próxima etapa política, Renzi exhortó en su discurso al resto de los partidos a «cargar parte del peso» de un nuevo gobierno hasta que se vote nuevamente, ya que «el PD ya pagó el precio de la soledad».
«No se trata de lo que quiere el primer ministro saliente, sino de lo que propone el Parlamento», planteó Renzi.
En ese marco, y como remarcó en una carta pública difundida antes de la reunión de PD, Renzi resaltó que el próximo gobierno deberá «hacerse cargo de las nuevas leyes electorales, pero sobre todo de un 2017 importante a nivel internacional», en el que incluyó «los 60 años de la Unión Europea, el G7 de Taormina, Sicilia, y la presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU» que le tocará a Italia a fin del próximo año.
«Si las otras fuerzas quieren ir a votar que lo digan claramente. El PD no le tiene miedo a la democracia, ni a la discusión, ni al streaming», ironizó luego al anunciar que las reuniones de dirección partidarias serán transmitidas online en vivo.
Frente a la ronda de consulta que iniciará Mattarella, Renzi propuso a la dirección de su partido declararse en «comisión permanente» y se autoexcluyó de una delegación que represente al PD en las discusiones para elegir a su sucesor.
Para reemplazar a Renzi hasta el nuevo llamado a las urnas o para terminar su mandato previsto hasta 2018 se barajan varios nombres, entre ellos algunos de perfil técnico como el ministro de Economía Pier Carlo Padoan y otros más políticos como el presidente del Senado Pietro Grasso o el canciller Paolo Gentiloni.
La principal tarea del gobierno de transición será la aprobación de una nueva ley electoral, aunque para aprobar una herramienta de voto habrá que esperar a que la Corte Constitucional se expida el 24 de enero sobre los recursos presentados contra la vigente «Italicum».
La importancia de sancionar una nueva ley electoral es central ya que la «Italicum», aprobada en mayo de 2015, sólo prevé elecciones para los 630 miembros de la Cámara de Diputados y no para los 315 miembros del Senado.
La fecha de convocatoria a elecciones se ha convertido en una de los debates centrales de la Italia post-referéndum: mientras el antisistema Movimiento Cinco Estrellas y la antiinmigración Liga Norte piden votar «de inmediato» utilizando parte de la Italicum, la derechista Fuerza Italia de Silvio Berlusconi prefiere discutir completa una nueva ley electoral y extender el período de transición.
«Elecciones inmediatas o saldremos a la calle con el 60% de los italianos que votó no en el referéndum», amenazó el líder de la Liga, Matteo Salvini.
«El Cinco Estrellas ya presentó un proyecto en la Cámara de Diputados para extender los principios del sistema electoral vigente para la Cámara para también el Senado para poder votar de inmediato», escribió hoy en su blog el líder del M5E, Beppe Grillo.
Este martes, el todavía ministro del interior, Angelino Alfano, advirtió a su ex socio político Berlusconi, que la eventual celebración de elecciones anticipadas puede perjudicarlo.
Si se celebraran elecciones anticipadas, el «Cavalliere» podría llegar a estar impedido de competir por ocupar cargos públicos debido a una sentencia judicial vigente, y que aún está siendo apelada ante un alto tribunal europeo sin que se haya resuelto el tema, señaló Alfano.
Otra opción desde lo formal, aunque poco probable, es que Mattarella encargue la formación de un gobierno tecnócrata que complete el mandato de Renzi, previsto hasta 2018.
Esta vía fue duramente criticada por el M5E, desde donde el diputado Luigi Di Maio criticó que esa opción sólo tendría como fin que los legisladores actuales lleguen en sus bancas a septiembre del año próximo para cumplir cuatro años en la Cámara y poder cobrar la jubilación.
Fuente: Telam