El pibe Lucas Martínez Quarta se está acostumbrando a las emociones fuertes. Con apenas 21 años pasó de ser un juvenil suplente a consolidarse como segundo marcador central e incluso marcar goles importantes en tiempo récord. Lo que no había conocido todavía era a vivir vaivenes en un mismo día, casi en una misma noche. Ayer lo aprendió. Lo sorprendió una noticia desagradable, se sobrepuso, jugó con la solvencia habitual; y en el minuto 69 aprovechó un rebote del arquero Vega para marcar el gol que le daría la victoria a River .
El primer cimbronazo fue por la tarde, con el equipo concentrado para afrontar el partido contra Aldosivi, cuando desde la Conmebol se informó que en la prueba antidoping realizada a Martínez Quarta el 10 de mayo pasado, tras el partido de Copa Libertadores frente al Emelec ecuatoriano, se habría detectado la presencia de hidroclorotiazida, una droga diurética prohibida por la Agencia Mundial Antidoping (WADA).
A partir de ese momento, el sube y baja de elementos a favor y en contra del pibe nacido en Mar del Plata ya no se detuvo. En principio, River comprobó -a través de AFA y Conmebol- que la comunicación de la infracción no incluía sanción provisional alguna, lo que le permitió a Marcelo Gallardo mantenerlo en la alineación que salió a disputar el encuentro; y al chico, olvidarse por un rato del asunto e incluso descargar la bronca gritando un gol propio.
La entidad de Núñez, mientras tanto, ponía en marcha a sus equipos médico y legal para tratar de averiguar lo sucedido y actuar en consecuencia. Ambas cosas quedaron resumidas en un comunicado emitido menos de dos horas antes del comienzo del partido, en el que por un lado se aclara que el medicamento en cuestión no se encuentra dentro del menú de fármacos utilizados habitualmente por los facultativos de la institución; y por el otro, que el jugador afirma no haber ingerido nada no recetado por los médicos del club. Y que en todo caso, se solicitaría una contraprueba y se pondría en marcha el descargo correspondiente.
Sólo un rato más tarde alguien se percató que el martes de esta semana la WADA había determinado una suspensión por tres meses del sitio especializado donde se efectuó el análisis de Martínez Quarta. En principio se pensó que esto podía servir para anular lo dispuesto por Conmebol, pero una lectura más detenida de lo dispuesto por la agencia dejó en el aire esa opción. Efectivamente, la cancelación de la acreditación del laboratorio de la UCLA (Universidad de California, en Los Ángeles) existe y tiene fecha efectivo de inicio del 14 de junio, pero se reduce al estudio de determinadas drogas que no incluyen la encontrada en la orina del futbolista riverplatense.
Después llegaría la más que correcta actuación del defensor durante los 90 minutos, coronada con el tanto que significó el 1-0. Y luego, el silencio.
Tal como se esperaba, el jugador no salió a hablar con los medios tras el partido. Pero sorpresivamente, Marcelo Gallardo tampoco apareció por la sala de prensa, postergando el encuentro para el viernes. Sólo Jonathan Maidana y Nacho Fernández hablaron un poco del asunto, sin ahondar en muchos detalles. «El tema nos sorprendió a todos. Él está tranquilo, más allá de la incertidumbre por no saber qué puede pasar, porque está seguro que no tomó nada raro», dijo el compañero de zaga de Martínez Quarta, entretanto el volante apostaba por una resolución rápida del asunto.
Justamente para acelerar los plazos, anoche mismo el equipo que encabeza el doctor Pedro Hansing se puso a trabajar para elevar el descargo. River pretende eludir la suspensión provisional, porque si esta llega es muy probable que deje al futbolista fuera del partido de ida ante Guaraní de Asunción por los octavos de final de la Libertadores, a disputarse el 4 de julio en el Monumental.
El departamento médico millonario apunta a una posible contaminación de la muestra que pueda haber alterado el resultado del estudio. Los diuréticos son fármacos utilizados en diferentes tratamientos, como la hipertensión o las retenciones de líquido de cualquier tipo, para aumentar la secreción de orina. Su presencia en la lista de sustancias prohibidas por la WADA a que su uso puede ayudar a enmascarar la presencia o acelerar la eliminación de drogas que mejoran el rendimiento deportivo.
La posibilidad de una ausencia de Martínez Quarta dentro de dos semanas frente a los paraguayos podría convertirse en un contratiempo aún mayor en función de lo que ocurra con el citado Maidana, que anoche debió retirarse en el minuto 48 debido a una molestia muscular en el recto anterior del muslo derecho. El alcance de su lesión se sabrá luego de los estudios que le realizarán durante el día de hoy.
El comunicado de River
Lo que finalmente ocurra con este inesperado caso de doping puede alterar los planes de River para el centro de su defensa. Gallardo ya estaba en pensando en gastar en esa zona uno de los tres cambios en la lista de buena fe para la Libertadores que autoriza la Conmebol para la siguiente fase. La idea era desprenderse del ecuatoriano Arturo Mina y buscar un refuerzo en ese sector. Ahora todo podría cambiar, y apenas quedan diez días para presentar la nueva lista.
Con la clasificación para la Copa 2018 casi en el bolsillo y el título en manos de Boca, River pretendía tener unos días relajados hasta el choque contra Guaraní. Claro que no contaba con Martínez Quarta, el pibe de las emociones fuertes.