El presidente regional de Cataluña, Carles Puigdemont, afirmó este domingo que los catalanes se han «ganado el derecho a tener un Estado independiente» de España después del referéndum de autodeterminación que realizaron pese a las operaciones policiales para impedirlo.
«Con esta jornada de esperanza y también de sufrimiento, los ciudadanos de Cataluña nos hemos ganado el derecho a tener un Estado independiente que se constituya en forma de república», afirmó en una comparecencia con todo su gobierno, celebrando la movilización de millones de catalanes en esta votación prohibida por la justicia.
Puigdemont informó que «en los próximos días» comunicará al Parlamento regional los resultados de la votación para que aplique los previsto en la ley catalana de referéndum de autodeterminación y proclame la independencia.
Por otro lado, lamentó la actuación de la Policía Nacional y la Guardia Civil contra los votantes: «España ha escrito hoy una página vergonzosa en su relación con Cataluña».
El mandatario independentista avisó a la Unión Europea que «ya no puede continuar mirando hacia otro lado» tras las cargas policiales contra ciudadanos que intentaban votar en el referéndum prohibido por Madrid.
La situación en Cataluña «es un asunto de interés europeo». «Somos ciudadanos europeos quienes sufrimos la vulneración de derechos y libertades», dijo en una solemne comparecencia, reclamando a Bruselas que «actúe con rapidez para mantener la autoridad moral dentro y fuera del continente».
Puigdemont subrayó que millones de personas se han movilizado este domingo y, a pesar de las «amenazas» del Estado español, tienen derecho a decidir su futuro en libertad. «Queremos vivir en paz, y fuera de un Estado incapaz de proponer algo distinto de la fuerza bruta», dijo.
Se refirió también a los más de 800 personas heridas, según las autoridades catalanas, a causa de la intervención de la Policía Nacional y la Guardia Civil para impedir el referéndum. En algunos casos se ha tratado de «claras violaciones» de los derechos humanos que no pueden quedar impunes, según Puigdemont.