Aunque faltó medio Gabinete -hay varios ministros de vacaciones y otros en una gira en Europa- Jorge Triaca fue el gran ausente en Casa Rosada, donde Mauricio Macri anunció el recorte en la planta política y la prohibición de que familiares de los ministros puedan tener cargos en la función pública. Pero igual el nombre del titular de la cartera de Trabajo sobrevoló durante el acto: nadie dudó de que la decisión del Presidente se definió luego del escándalo que sacudió a Triaca.
En efecto, el ministro de Trabajo será uno de los más perjudicados por el decreto que en las próximas horas firmará Macri para establecer qué familiares de hasta segundo grado de consanguinidad de los ministros no puedan integrar la planta política. Esto es: padres, hijos, cónyuge, hermanos, abuelos y nietos. También nueras y yernos. No primos. En el caso de Triaca, tres familiares directos deberán renunciar.
De este modo, la mujer de Triaca, Cecilia Loccisano, deberá dejar su cargo como subsecretaria de Coordinación Administrativa del Ministerio de Salud.
Lo mismo deberá hacer su hermana, Mariana Triaca, quien fue designada en diciembre como directora del Banco Nación, nombramiento que puso al ministro en el centro de la escena, antes del escándalo con su casera Sandra Heredia.
Lorena Triaca, otra de las hermanas del ministro, también dejará su cargo como directora de Asuntos Externos de la Agencia Argentina de Inversiones, un área que depende de la Cancillería y el Ministerio de Producción.
Si bien los cuñados y yernos también son alcanzados por la medida, Ernesto Reta podrá seguir en el directorio del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE): aunque designado por la actual administración, por ahora es pareja sin papeles de Mariana Triaca.
Cerca de Triaca aseguraron que, más allá del decreto, dijeron que sus familiares «se iban a ir igual»: el ministro ya los había convencido de que presentaran la renuncia. Busca dar una señal.
Clarín
