Para muchas personas que temen volar, no hay momento más seguro que cuando el avión está firmemente estacionado en la pista del aeropuerto tras el aterrizaje.
Pero en el caso de estas dos aeronaves de pasajeros, el terror llegó en el suelo y a poca velocidad, cuando un Airbus A330 de la aerolínea surcoreana Asiana arrancó el timón de cola de una unidad de Turkish Airlines mientras se trasladaba hacia la terminal en el aeropuerto internacional de Estambul.
De acuerdo al periódico Korean Times, no hubo heridos en el incidente aunque sí se inició un pequeño incendio en el avión turco y hubo pánico entre los pasajeros.
Kaarina Barron, una británica de 55 años que estaba dentro del avión turco, relató el aterrador momento. «Acabábamos de aparcar. No habíamos estado completamente quietos ni por un minuto y los motores siguen andando cuando escuchamos un enorme ruido», dijo al periódico Daily Mail.
Sonó como si una bomba hubiera explotado y todo el avión pareció ladearse
«Sonó como si una bomba hubiera explotado y todo el avión pareció ladearse.Pensé que se iba a dar vuelta. Me incliné hacia un lado y luego se estabilizó. Muchas cosas daban vueltas en mi cabeza en ese momento, pensé que el avión había explotado», relató.
Barron también dijo haberse sentido muy asustada, y pensó en un momento que «el momento había llegado, era el final de mi vida».
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Un video distribuido en redes muestra el momento en el que la aeronave de Asiana avanza lentamente y golpea con su ala derecha el timón de cola del Airbus A321, que se sacude fuertemente por el golpe.
El ministerio de Transporte de Turquía señaló que está investigando el hecho y ha dicho que si halla responsabilidad en la aerolínea Asiana se tomarían las medidas correspondientes, indicó la cadena 9 News.
Un accidente similar había ocurrido en novimebre en el aeropuerto J. F. Kennedy de Nueva York, cuando un avión de Egypt Air arrancó con su ala la punta del ala de un vuelo de Virgin Air, sin provocar heridos.
En el caso de Turquía, Barron ilustró muy bien por qué en los aviones se suelen pedir a los pasajeros que permanezcan sentados y con el cinturón abrochado a pesar de que el avión se haya detenido.
«Había muchas personas paradas en el pasillo, a pesar de que el indicador del cinturón de seguridad seguía encendido. Todos salieron volando y cayeron por todo el lugar, fue surreal», explicó.
Fuente: Infobae
