El ex gobernador de la provincia de Buenos Aires y actual diputado nacional de Unidad Ciudadana Daniel Scioli ratificó este domingo su intención de ser candidato a presidente y aseguró que llevará adelante su decisión más allá de lo que haga la ex presidenta Cristina Kirchner.
«Voy a ser candidato a presidente, independientemente de lo que haga Cristina. No es un desafío a nadie en particular. Es una responsabilidad y un compromiso para revertir esto», indicó el legislador en diálogo con Futurock. Y agregó: «El día después (de la elección) nos vamos a necesitar todos para sacar adelante el país».
El mensaje de Scioli se condice con el que emitió el 14 de marzo, día en que lanzó su candidatura y adelantó que «más allá de lo que resuelvan otros» iba a ser «precandidato a presidente». En esta oportunidad, aclaró que su intención seguirá en pie sea cual sea la decisión que tome la ex jefa de Estado, líder del espacio político en el que milita el ex gobernador.
Durante la entrevista sostuvo que en las próximas elecciones «la gente tiene una nueva oportunidad de hablar a través de las urnas y marcar si hubo avances o retrocesos con respecto a lo que generó el Gobierno» e indicó que el mejor camino para resolver las candidaturas es llevar adelante «una gran PASO opositora».
«Anhelo que se dé la unidad del arco opositor a través de las PASO. Es un momento en que todos estamos hablando con todos, con mucha responsabilidad», indicó el diputado, al tiempo que señaló: «Una alianza de gobierno la tenemos que confrontar con un programa de gobierno».
Con respecto a la posible candidatura de Roberto Lavagna, sostuvo que «en el tiempo que se viene y con los desafíos que tenemos por delante, va a demandar lo mejor de cada mujer y hombre». En ese sentido, destacó que para esa instancia es importante «el volumen de experiencia y audacia para el cambio de rumbo necesario». Y, finalmente, afirmó: «Cada uno que tenga voluntad merece mi respeto y consideración. El país necesita el mayor esfuerzo de todos».
El ex gobernador señaló que en el caso de ser presidente «no trataría de plantear un refinanciamiento de la deuda, sino un cambio de programa económico, con otras prioridades». Para ejemplificar retrató el ejemplo de Portugal que «se le plantó al FMI y le dijo que los tenían que dejar crecer para poder pagarle la deuda».
Por otra parte, analizó su relación actual con el kirchnerismo y dijo: «Es un vínculo que ha tenido sus tensiones y su punto de vista distinto, pero siempre ha prevalecido una mirada en común a favor del país».