Un grupo de encapuchados atacó este domingo con piedras y otros objetos contundentes el frente de un hotel cercano al escenario del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, en medio de una manifestación contra la realización de esa tradicional reunión de músicos y cantantes en la costa de Chile, convocada con la consigna «Sin justicia no hay festival».
El incidente, que dejó decenas de ventanas y mamparas destruidas, además de otros daños, tuvo lugar en el hotel O’Higgins, mientras cientos de personas protestaban en la cercana plaza Vergara contra la celebración del festival.
Los encapuchados fueron repelidos por efectivos de Carabineros, que utilizaron dos carros hidrantes y otros dos lanza gases.
Luego, los disturbios se extendieron a la plaza Vergara, muy cercana a la Quinta Vergara, en cuyo anfiteatro se realiza el Festival y a la que estaban llegando miles de espectadores, a los que se obligó a modificar el itinerario de ingreso para preservar su seguridad.
La protesta, convocada a través de redes sociales bajo la consigna «Sin justicia no hay festival», estuvo vinculada con el estallido social que vive Chile desde octubre pasado.
«Fuimos atacados por un grupo de unas 30 personas que quisieron ingresar al hotel; después, se incorporó más gente de la plaza y fue una lluvia de piedras; los tuvimos que sacar con la gente de seguridad nuestra», relató el gerente del hotel, José Antonio Dávalos.
«Nos vimos total y absolutamente sobrepasados; no hay seguridad que pueda resistir, a no ser que haya seguridad externa que pueda parar una cosa como ésta», agregó el ejecutivo.
La de este domingo es la primera jornada de la 61ª edición del Festival y están previstas las presentaciones de los cantantes puertorriqueños Ricky Martin y Pedro Capó, así como del actor, imitador y comediante chileno Stefan Kramer.
El Festival se extenderá hasta el viernes próximo y, para los próximos días, están programadas las actuaciones de los argentinos Luciano Pereyra y el dúo Pimpinela, así como de la cantante mexicana Ana Gabriel, entre otras figuras.
Chile vive, desde el 18 de octubre pasado, un estallido social que dejó más de 20 muertos, 3.765 heridos y 10.365 detenidos, según datos oficiales.
Las protestas no se acallaron con la decisión del gobierno del presidente Sebastián Piñera de convocar a un plebiscito para que los chilenos decidan si desean una nueva Constitución -núcleo de los reclamos-, así como los mecanismos para elaborarla.
Piñera afirmó este domingo que su gobierno está «preparado» para enfrentar eventuales situaciones de violencia en marzo, para cuando varias organizaciones sociales convocaron a distintas protestas tras el receso del verano.
«El gobierno se ha preparado para resguardar el orden público e impulsar un marzo de acuerdos, para aumentar las pensiones, crear el ingreso mínimo garantizado y mejorar la salud», dijo el mandatario en Twitter.
Cadena 3