Consultado sobre la diferencia de muertes por coronavirus entre Argentina y Brasil, teniendo en cuenta que los casos comenzaron a registrarse prácticamente en paralelo, a inicios de marzo, el mandatario ultraconservador enfureció.
«Es sólo hacer la cuenta por millón de habitantes, pero hablemos de Suecia, que no cerró la economía. Ustedes hablan del lado ideológico, ustedes hablan de un país que camina hacia el socialismo, que es la Argentina«, dijo Bolsonaro.
Con 210 millones de habitantes -más de cuatro veces y media los de Argentina-, Brasil tiene ya más de 13.100 muertos por coronavirus y casi 190.000 casos, mientras que nuestro país registra más de 340 decesos y unos 6.800 contagios.
El mandatario brasileño volvió a la carga contra el cierre total o medidas de cuarentena que tomaron los gobernadores desde marzo sobre todo porque aún no llegó el pico de la enfermedad al país.
«Esta historia del lockdown (cierre o cuarentena) es un fracaso, va a quebrar a Brasil. Les digo a los gobernadores que den marcha atrás, que vamos a dialogar», dijo.
«Es mentira que habrá recuperación económica. No se recuperará. Seremos un país de miserables, hay que enfrenar el virus con coraje, morirán muchos, lamento, lamento, lamento, pero morirán más destrozados por hambre y falta de empleo», subrayó Bolsonaro.
El gobierno de Brasil calculó ayer que el Producto Bruto Interno (PBI) caerá 4,7% en 2020, mientras que la fuga de inversores de la plaza brasileña provocó una devaluación del real superior al 46% en lo que va del año.
En tanto, Bolsonaro echó mano de la crisis por el coronavirus para publicar una medida provisional que exonera de responsabilidad penal a los agentes públicos por las acciones u omisiones que hayan podido cometer intencionadamente o por «error» en el marco de la lucha contra la pandemia, informó la agencia Europa Press.
«Los agentes públicos solamente podrán ser responsabilizados en las esferas civil y administrativa si actúan u omiten con dolo o por error en la práctica de los actos relacionados directa o indirectamente con la emergencia de salud pública», reza el texto publicado al filo de la medianoche del miércoles.
Bolsonaro ha hecho de su alianza con las fuerzas de seguridad, especialmente con los militares, una de las banderas de su Gobierno, que incluye a varios uniformados.