Tras varias horas de intensas averiguaciones, una joven que denunció haber sido raptada y abusada sexualmente terminó confesando que inventó toda la historia. La investigación estuvo a cargo del personal de la Comisaría de Quimilí y demás áreas de la policía.
Según se informó, una mujer mayor de edad informó a los guardianes del orden que su nieta, de 16 años, habría sido raptada cuando se dirigía -en motocicleta- a Vilelas.
La denunciante explicó que una camioneta de color gris, con dos ocupantes interceptó a la supuesta víctima y la habrían obligado a subir al rodado, ocasión en la que fue vejada sexualmente y a posterior abandonada.
En un trabajo contrareloj los numerarios de la Dirección General de Investigaciones, el Departamento Trata de Personas y Leyes Especiales, la División de CiberDelito y el Departamento de Seguridad Ciudadana Nº 12 de Quimili, terminaron por dilucidar la verdadera historia de una menor.
La adolescente fue trasladada a ciudad Capital y en el Cuerpo Médico Forense intervino en la investigación. Paralelamente, las autoridades policiales de Quimili citaron a testigos y vecinos donde sucedió el incidente. Así como también se elaboró un registro de los propietarios de camionetas similares a la descripta por la víctima.
Con el paso de las horas, la menor comenzó a contradecirse y cambiar su versión constantemente. Estos episodios terminaron jugando en contra de la damnificada, quien, en presencia de su abuela, terminó reconociendo que inventó la historia.
La jovencita confió que “inventó” lo sucedido, “porque se le hizo tarde” para regresar a su casa.