El Gobierno de Chile presentó un recurso de apelación para que la justicia de ese país revoque la libertad condicional otorgada al autodenominado dirigente mapuche Facundo Jones Huala, quien cumplía una condenado por varios delitos cometidos en tierras trasandinas.
La decisión de la administración del presidente Sebastián Piñera había sido adelantada por su subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, quien consideró que el beneficio al que accedió el detenido “va exactamente en el sentido contrario” de lo que exige la ciudadanía.
“El condenado no cumple con los requisitos legales y reglamentarios para concederles el beneficio de libertad condicional”, sostuvieron los abogados del Ministerio del Interior y Seguridad Pública del país vecino en el texto que presentaron el sábado.
En este sentido, las autoridades trasandinas solicitaron que “se revoque la resolución recurrida y que se rechace el amparo” a favor de Jones Huala, “toda vez que no existe acto ilegal o arbitrario alguno en la resolución impugnada de la Comisión de Libertad Condicional”.
Entre los argumentos brindados por el gobierno chileno para pedir que se revoque la libertad condicional del condenado, se señaló que el dirigente mapuche “nunca ha reconocido el delito cometido” ni “ha dimensionado el daño realizado”, y por tanto “su conducta de manera sostenida es refractaria a los valores de respeto por los derechos de las personas”.
El condenado fue liberado el viernes
Facundo Jones Huala, oriundo de la Argentina y líder de la agrupación Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), fue puesto en libertad condicional el viernes pasado por la tarde, luego de que la Justicia de Chile aceptara un amparo que presentaron sus abogadas.
En el país trasandino cumplía una pena de nueve años de prisión por haber participado del incendio de una propiedad en 2013 y había sumado otra condena a tres años de cárcel por posesión de un arma de fuego artesanal.
La propia madre del acusado había adelantado horas antes que su hijo saldría en libertad y precisó: “Después se tramitará para que pueda cruzar para este lado de la cordillera”. Sin embargo, por el momento no podrá regresar a la Argentina porque debe hacer otra presentación judicial que sea aceptada por los tribunales de Chile.
En la Patagonia están alerta a esta posibilidad, debido a que en una de sus últimas apariciones a través de comunicados que escribió desde la prisión, el líder de la RAM llamó a “vengar la muerte de Elías Garay”, el integrante de la comunidad Lof Quemquentreu que fue asesinado de un disparo en noviembre pasado en el paraje Cuesta del Ternero, entre El Bolsón y Bariloche.
Tras abandonar el establecimiento carcelario de Temuco donde permanecía detenido, Huala expresó su gratitud a los “peñis” y revindicó “a las organizaciones mapuches revolucionarias, a todas las comunidades de resistencia revolucionaria mapuche y a mi organización Resistencia Ancestral Mapuche y al movimiento mapuche del Puelmapu”.
La oposición cuestionó la liberación del líder de la RAM
En un breve contacto con medios de prensa del país vecino, dijo que “la violencia política del Estado tiene que seguir en el camino de la autodefensa a los peñis y el sabotaje a las grandes empresas, pero no violencia innecesaria y desmedida entre nosotros, el pueblo mapuche y los pobres”.
“El enemigo es uno solo, el gran capital transnacional, el imperialismo y la oligarquía, y los estados opresores en servicio de toda estas burguesías nacionales y extranjeras. Ellos son el enemigo”, sentenció.
Y agregó: “No es el winca pobre, no son los pequeños parceleros, son las empresas forestales, las mineras, petroleras e hidroeléctricas, tenemos que seguir avanzando en ese camino hasta liberar al pueblo mapuche”.
La dirigencia opositora en la Argentina también expresó su preocupación por la liberación de Jones Huala, al señalar que fue el responsable de “ejercer una una violencia extrema” en la Patagonia y encabeza una agrupación que “no reconoce los mecanismos del Estado de derecho y se ha aislado del pueblo mapuche”.
