La vigilia celebrada en el Circo Massimo de Roma, concluyó con una intervención de el sumo Pontífice, en la que pidió a María: «enséñanos a renovar el mundo desde dentro, desde la profundidad del silencio y de la oración«.
Solicitó también que los hombres sepan «escuchar la Palabra de Dios y sean dóciles a la voz del Espíritu Santo y que escuchen sus conciencias».
Benedicto XVI proclamará, el domingo, beato a su antecesor Juan Pablo II, seis años y un mes después de su muerte. A doce horas de que eso suceda, ya son miles los fieles que hacen fila para entrar en la plaza de San Pedro del Vaticano, que será abierta a las 5.30 horas local (03.30 GMT).
Letras gigantes que portaban asistentes al evento formaban en el interior del Templo Mariano la frase «México siempre fiel», el lema que acuñó el difunto Papa durante sus cinco visitas al país.
Mexicanos y extranjeros de diferentes profesiones y oficios rezaron el Ave María. Otros siguieron la transmisión desde el Vaticano en pantallas colocadas a los costados del altar.
Fuente: EFE-AFP
