Tener cuatro medallas olímpicas genera un enorme prestigio en el mundo del deporte, pero en el mundo de la política es solo un hecho que puede causar admiración. A lo sumo, conlleva la posibilidad de un abrazo cálido y la consulta pasajera sobre alguna anécdota en las competencias internacionales. «Camau», como lo conocen en Argentina, lo sabe bien.
Por eso Carlos Espínola, el que ingreso a la política en el 2009, dejó sus credenciales en Corrientes y llegó a territorio ajeno con la ambición de querer colaborar para cambiar la realidad.
Nueve años después, sentado en su despacho de senador nacional y con el mate que tiene escrito su apodo, confiesa que «a veces es angustiante el mundo de la política» porque cuando padece el momento en que se enfrenta a la realidad que la política no pudo modificar. En una entrevista con Infobae repasó la situación actual del país, el momento que atraviesa el peronismo y el escenario electoral del próximo año.
-El escenario político está dividido. La compleja situación económica por un lado y el escándalo de los cuadernos K por otro. Frente a ese panorama, ¿el peronismo tiene la posibilidad de crecer y consolidarse como un espacio político nuevo?
-Cuando me involucré en política, venía de ser deportista y haber representado a la Argentina, lo hice porque sentí la responsabilidad de involucrarme para lograr un país mejor y que genere futuro. Hoy, más allá de las situaciones preocupantes que se viven en el país y que nos afecta a todos, siento la responsabilidad de construir una alternativa hacia la sociedad. De generar un proyecto que pueda sacar adelante al país, que tenga un plan económico que se cumpla en tiempo y forma, para poder revertir la situación económica que se vive. Después recuperar la credibilidad institucional y recuperar a una generación que está perdiendo muchos años de su productividad.
-¿Cuánto impacta en el sistema político lo que está sucediendo con los cuardernos de la corrupción?
-Impacta en el sistema político, en lo económico y lo empresarial. Impacta en el sistema institucional de la Argentina y a nivel internacional. Los relatos son muy fuertes. Por eso siento una fuerte responsabilidad para que el impacto negativo se pueda reconstruir como una alternativa, como un proyecto que hable de las problemáticas institucionales del país.
-¿Cuáles pueden ser las consecuencias que sufra el país frente a este escenario?
-La Justicia tendrá que ir comprobando los hechos con el procedimiento que corresponda. Ajustado al derecho de cada una de las personas y con la decisión de investigar todo lo que estamos viviendo. Hace falta que se sepa la verdad en todo este procedimiento. Todo esto tuvo un impacto en la política. Hoy en la sociedad preguntas por la política y tiene una imagen negativa muy alta. A mi me preocupa mucho el escenario político y económico de la Argentina. Hoy hay un escenario en el que hay que poner mucha voluntad y convicción. Es un momento difícil de la Argentina. A partir del año que viene, con la decisión de la gente, esperamos tener una alternativa electoral que pueda sacar adelante el país.
-¿Este tipo de escenario no desgasta la credibilidad del sistema político y de los políticos frente a la sociedad?
-Siempre hay desgaste. A todos nos desgasta. Antes de involucrarme en política tenía el 95% de imagen positiva en Corrientes. El día que me metí bajé un montón. Porque a partir de ese momento hay intereses partidarios y hay sectores que ya no te ven con buenos ojos porque estas en la vereda de enfrente. Yo trabajo con la misma convicción y ganas que cuando tenía que competir y representar a la Argentina. Con errores, con aciertos, pero con ganas de poder debatir y discutir una Argentina mejor. Quiero dejarles a las generaciones que vienen detrás nuestro la oportunidad de vivir mejor.
-¿Qué perdió con su paso del deporte a la política?
-En el deporte casi siempre vivía a alegrías, más allá de los malos resultados que uno puede tener. En la política a veces hay objetivos que no se pueden cumplir. Cuando uno puede ver que hace un esfuerzo y no tiene el impacto que desea en la sociedad, en las personas y en las familias, como me ha pasado en Corrientes, esa angustia es mucho más fuerte que cuando uno compite y no puede alcanzar los objetivos. Uno tiene que ver como puede construir y generar desde la política para poder darle una posibilidad a este sector que hoy lo está sufriendo. En la política uno siente que hay mucho para hacer y que es complejo resolverlo en el corto y mediano plazo. Por eso es muy importante trabajar un programa económico y un plan a largo plazo.
-¿Qué le aportan a la política los hombres y mujeres que vienen de otras actividades?
-Yo estoy hace tiempo pero no pierdo esa visión por la que me metí en política. Podemos aportar ideas para oxigenar o tener una visión distinta de ciertas cuestiones. Pero la estructura política tiene un valor que uno tiene que respetar y entender. Tiene sus complejidades. En la actualidad debemos ir corrigiendo las cuestiones que tienen un impacto negativo en la sociedad como sucede con el tema de los cuadernos o las problemáticas económicas que se viven. O también el problema de las discusiones sin sentido que se llevan adelante dentro del ámbito político y que no sirven para resolver cuestiones de fondo.
-¿La realidad actual le da la posibilidad a un outsider de poder ser una alternativa para las elecciones del año que viene?
-Analizar hoy lo que va a pasar el año que viene es todavía muy complejo, sobre todo teniendo en cuenta como varía día a día el rumbo del país. El contexto electoral del año que viene va a estar muy sujeto a como esté el país económicamente y como esté la situación social. Pero la posibilidad de un outsider dependerá de la situación económica del próximo año. Cuando hay complejidad económica la sociedad quiere a alguien que tenga experiencia para poder llevar adelante el país. Es la historia de la Argentina. Ahora, si la situación económica es distinta seguramente habrá posibilidad para discutir si un outsider tiene lugar o si aparece alguien que venga a refrescar con algunas ideas. Pero mi preocupación es cual va a ser el modelo político que pueda sacar adelante la Argentina. Hoy vivimos una gran complejidad económica, con un endeudamiento altísimo. No hay inversiones. El riesgo país está alto. ¿Quién va invertir en Argentina en este contexto de conflictividad que hoy se vive?
-El gobierno encuentra diferentes explicaciones frente a la difícil situación económica. Pero evita hablar de crisis…
-A veces trato de entender,cuando públicamente tratan de transmitir que tienen una receta que la van a ir llevando adelante, pero que hasta ahora no tuvo un efecto positivo. Recuerdo que en marzo hablaban que iban a bajar la inflación y en vez de bajarla, la inflación se disparó. Decían que iban a venir inversores y todavía no vinieron. Me pregunto sin son conscientes realmente que la economía está afectando a los argentinos, que hay sectores de la sociedad que día a día se le hace más difícil vivir. Gente que no puede pagar la luz o el gas, que hay empresas están cerrando y que las pymes hoy no pueden cumplir y llegar a fin de mes.
-¿Cree que no son conscientes?
-Trato de pensar que lo son. Espero. Cuando uno está en un lugar tan importante de la función pública o en la vida cotidiana, cree que las cosas no salen o no se dan por error de los otros y no asume la responsabilidad. Uno puede entender que hay coyunturas que hacen que los objetivos no se cumplan, pero también deben asumir los errores que van cometiendo para que eso no suceda. Espero que tengan la capacidad de reflexionar.
-¿Ustedes están convencidos de haber cumplido bien el rol opositor en estos años del gobierno de Macri?
-Es importante lo que se ha planteado siempre desde el Congreso y desde la fuerza opositora. Creemos que el debate y la construcción de un país mejor se puede dar más allá de los sectores políticos que uno representa. Nosotros venimos tratando de plantear cuestiones que realmente mejoren la situación económica. Cuando hablamos del tarifazo le dijimos al Presidente que más allá de la decisión que tome, ponga la lupa porque hoy la gente no puede pagar. Hace poco presenté un pedido de informes por las diferencias de precios que hay en el combustible. Nosotros en Corrientes tenemos un combustible mucho más caro que la Capital Federal y eso hace a perder competitividad. No solo el costo que tiene para la gente, sino también para nuestra producción.
-El presidente le ha pedido compromiso al peronismo en reiteradas oportunidades y los ha criticado por no respaldar medidas como el aumento de tarifas…
-Nosotros hemos acompañado y le hemos dado los instrumentos para que el Presidente pueda tomar las medidas que necesitaba para sacar adelante el país. Si cree que la responsabilidad es de la oposición, estamos en problemas. Yo no creo que el camino sea echarse culpas, sino hacerse cargo, buscar el consenso necesario y ser conscientes de la situación que atravesamos.
-¿Sigue existiendo el diálogo entre el sector de la oposición que representa y el Gobierno?
-Hace poco, cuando hubo un momento económico complicado, convocó a diferentes sectores para poder hablar. Hoy no hay una continuidad. Hay muchos que estamos dispuestos a hablar y colaborar en la medida que haya una salida con un plan económico que se cumpla. Y no ir con variantes en función si me conviene esto lo hago o no. Eso es lo que estoy sintiendo en referencia al rumbo económico actual. Espero que no sea solo un relato público, sino un trabajo en serio, porque este rumbo económico es muy difícil para la Argentina y hay una generación que hoy está perdiendo oportunidades.
-¿Este Gobierno tiene un relato propio de la realidad?
–Por supuesto que tiene un relato. Un relato en donde hay muchas cosas que no coinciden. En marzo nos dijeron que la inflación empezaba a bajar en mayo. Estamos en agosto y la inflación se disparó. En diciembre de 2017 nos trajeron un presupuesto que habla de una inflación baja, la corrigieron, la llevaron al 15% y hoy estamos hablando que, con suerte, vamos a estar en cerca del 30%. El relato no refleja la realidad. Yo quiero formar parte de un relato que la refleje.
-Cuando Mauricio Macri llegó al gobierno afirmó que el kirchnerismo había montado un relato de la realidad. ¿Ahora está sucediendo lo mismo con Cambiemos?
-No creo que la solución del futuro de Argentina sea mirar el relato del pasado. Han pasado casi tres años de gobierno. Necesitamos tener un relato hacia el futuro. Eso no quita que no se investigue, que no se mire para atrás, que no se vean cuestiones que hoy tienen que esclarecerse. Pero empecemos a hablar de que vamos a hacer en el futuro. Pasa el tiempo y no hay respuesta. Quiero hablar de futuro y cuando hablo de una alternativa, de una construcción del año que viene, es para hablar de futuro. Basta de hablar del pasado como excusa para poder justificar los errores que se cometieron.
-¿Y qué puede aportar el peronismo que ustedes representa el próximo año?
-Una propuesta. Pero no solo desde el peronismo, sino una propuesta amplia de otros sectores que se quieran sumar. En el contexto del año que viene va a ser muy importante tener una apertura para convocar a otros sectores y poder consolidar una alternativa que le dé a la sociedad una visión de futuro.
-¿Cómo describiría al espacio que están construyendo en el peronismo?
-Está en un proceso de construcción. Todos sentimos la responsabilidad de poder construir una alternativa hacia la sociedad. Veo un gran desafío y una gran decisión de ser parte. Hay muchos que hoy no aparecen en el escenario y que tienen esta visión. No aparecen porque consideran que no es el momento de discutir tanto de política frente a la situación que se vive.
-Hay nombres propios dentro del espacio que se mueven por separado. Es el caso de Miguel Pichetto, Juan Manuel Urtubey, Sergio Massa, Sergio Uñac. ¿De ahí sale el candidato del espacio que representan?
-Son los que están mostrando voluntad de querer competir el año que viene. Pueden aparecer otros. Para mi es importante que haya voluntad y cuanto más candidatos haya en este camino de construcción, mejor. La competencia interna va ser que el año que viene salga el mejor candidato.
-Falta un año para las elecciones. ¿El proceso de construcción del espacio no debería acelerarse?
-Hay diferentes visiones. Algunos sienten que hay que acelerar y otros sienten que no es el momento. Yo creo que hay que ir trabajando y mostrando la voluntad hacia la sociedad. Lo que si hay es un proyecto general que tiene la voluntad y la capacidad de poder construir una alternativa para el año que viene. Los candidatos irán surgiendo después.
-Formó parte del último gobierno de Cristina Kirchner. ¿Qué impresión le generaron las declaraciones de los empresarios y ex funcionarios arrepentidos?
-A todos nos chocan los relatos, las declaraciones, lo que se escucha. Fui funcionario en la secretaria de Deportes y puedo resaltar un montón de cosas buenas que se hicieron durante la gestión y que han sido muy positivas para el deporte. Es muy importante que el proceso de investigación pueda esclarecer todo lo que ha sucedido. Es importante que la ex presidenta pueda ser parte de aclarar y allanarse al proceso de investigación para poder demostrar su inocencia.
-¿Creyó en el liderazgo político de Cristina Kirchner cuando formó parte de su gobierno?
-Fue presidenta por dos etapas en Argentina y hubo cosas muy buenas que se han hecho y que hoy se continuan. Nadie puede discutir el liderazgo que tuvo como presidenta durante ocho años.
-¿En qué rol la imagina a Cristina de aquí en adelante?
-Yo soy de los que cree que los presidentes y los gobernadores tienen que tener dos períodos y no poder ser reelectos nunca más en ese cargo. Es mucho más saludable hacer un proceso de dos períodos para que el gobernante pueda cumplir con su proyecto y que después no pueda ser reelecto. Eso va a ser a que el rol del ex presidente sea desde la colaboración y no de la posibilidad de volver. Porque esa posibilidad de volver hace que la política lo vea como una amenaza. Necesitamos que todos los ex presidentes colaboren y aporten su experiencia para que el país sea mejor.
-¿La ve a Cristina candidata el año que viene?
-No lo sé. Es una decisión de la ex presidenta. Creo que es mejor que ella pueda colaborar en este proceso de investigación que está abierto y del que es parte. Pero no sé que hará ella el año que viene.
-¿Cuál es el futuro del kirchnerismo?
-Es una fuerza que tiene su respaldo y la figura de ella es muy fuerte. Es lógico. Fue una ex presidenta que tiene un sector de la sociedad que la acompaña y la valora.
-¿Existe el kirchnerismo sin Cristina Kirchner?
-Hoy la figura del kirchnerismo es ella y eso lo demuestra constantemente.
-¿El debate sobre el aborto generó rispideses internas en los bloques legislativos del peronismo?
-No. Yo no vi ningún tipo de rispidez, más allá de la diferencia de opiniones. Al contrario, vi un gran respeto a la posición de cada uno y eso lo valoro mucho. Cuando hay diferencias en el bloque, se debaten. Miguel Pichetto, como jefe de bloque, en eso es muy respetuoso de las posiciones de cada uno.
-Fue dos veces candidato a gobernador en Corrientes. ¿Qué piensa hacer cuando termine su mandato como senador nacional?
-Con la situación compleja que vive el país tenemos que estar muy preocupados y pensando que va a pasar el año que viene. El año que viene es una elección en la que se decide el próximo presidente de los argentinos y esa elección va a ser muy importante para el rumbo del país. Hoy siento una gran responsabilidad de poder construir una alternativa, más allá de lo que la gente elija el año que viene. La complejidad económica y social que vivimos no permite pensar que en lo que va a suceder en el 2021 cuando termine mi mandato.
-¿Teme una situación económica más compleja que la que se vive en este momento?
-Hay variantes que demuestran que no va a mejorar la inflación y que el ajuste que hoy que está planteando el gobierno hacia los municipios y las provincias, va a tener un impacto muy fuerte en la obra pública. Esta situación que se vive actualmente con el mundo empresario de la Argentina tiene un efecto muy fuerte en las obras que se están construyendo. Quiero ser prudente y tener mucho cuidado en esta etapa que hoy vive el país, para no volver a una crisis que fue muy mala para todos.
-En el 2017 convocó a Nito Artaza para ser candidato a vicegobernador, un dirigente que viene del radicalismo. ¿El peronismo que están armando tiene que seguir el mismo camino?
-Es una etapa donde uno tiene que tener la apertura necesaria para que todos los que coincidamos podamos participar de la misma alternativa política.
-¿Se arrepiente de haber pasado del campo del deporte a la política?
-No. Nunca me voy a arrepentir. Porque más allá de lo difícil o angustiante que es estar a veces en el mundo de la política, no hay mejor cosa que poder tener las herramientas que uno tiene en la gestión pública para mejorar la calidad de vida de la gente.
-¿Pasó por momentos de angustia cuando se metió a la política?
-Siento angustian cuando recorro y veo la pobreza que hay, o cuando entro a un hospital y no se da el servicio que la gente necesita. Siento angustia cuando vemos la falta de crecimiento y desarrollo que se sufre en el interior. Esa es la angustia que siento. Al resto le pongo el pecho, para eso tomé la decisión de involucrarme en política.