La Justicia uruguaya liberó hoy a los cuatro hombres detenidos en las últimas horas en el marco de la investigación por el crimen de Lola Chomnalez, mientras sigue la búsqueda de un albañil que responde al identikit difundido ayer y de un nuevo sospechoso que ya había sido requerido por la magistrada Marcela López, pero que la policía no pudo encontrar.
El vocero de Suprema Corte de Justicia uruguaya, Raúl Oxandabarat, aseguró hoy que el hombre del identikit, de iniciales A.C.J., sigue prófugo y es «el más sospechoso» por el asesinato de la adolescente argentina de 15 años. El canal TN informó que en Valizas se lo conoce como «El Conejo» y que desapareció luego del crimen, aunque en su familia dicen que no lo ven desde Navidad.
Su madre se presentó a declarar en forma voluntaria ante la jueza López y la fiscal Soledad Barriola en los tribunales de la localidad uruguaya de Castillo. «Mi hijo no es capaz de matar un pollo, menos creo que sea capaz de sacarle la vida a una mujer, pero vamos a esperar qué dice el dictamen judicial», dijo. Además, prometió que el prófugo se va a presentar a la Justicia una vez que tenga «garantías».
La declaración de la mujer derivó a su vez en un nuevo pedido de captura. Esta vez, la magistrada puso en la mira al hijo de la dueña de un almacén de Valizas en el que trabaja la madre del «Conejo». Se trata de un joven identificado como H, cuya detención había sido solicitada el fin de semana, pero que no se pudo materializar ya que la policía no lo encontró. La información fue confirmada al sitio Subrayado por el vocero de la Suprema Corte de Justicia, Raúl Oxandabarat.
El primero de los liberados hoy fue Juan Sosa, de 20 años, que estuvo junto a A.C.J. pintando el techo de una casa azul y amarilla ubicada sobre la playa del balneario Valizas. «Yo estaba trabajando y vi a este muchacho que estaba muy mal. Le ofrecí trabajo y ahora la Policía lo está buscando», comentó a los medios tras declarar ante la jueza.
Esta tarde, en menos de una hora la magistrada dejó en libertad a otros dos detenidos, Mariano y Martín. Ninguno de ellos había estado en Valizas en los días cercanos a la desaparición de Lola. Uno de ellos dijo que la investigación es un «papelón».
Finalmente, sobre las 20 horas de Uruguay, el último de los detenidos dejó los tribunales de Castillo.Fue indagado porque supuestamente alojó en su casa al principal sospechoso.
Fuentes judiciales citadas por medios uruguayos informaron hoy que se realizó un allanamiento en la casa de uno de los sospechosos y se encontró una crema humectante para manos de origen argentino que el propietario no pudo explicar cómo y por qué la tenía en su poder. Este elemento puede ser clave en la investigación, dado que presuponen que pudo estar dentro de la mochila de la adolescente argentina que todavía no se encontró. No obstante, no trascendió en dónde se realizó el operativo, aunque TN sugirió que sería la casa del último liberado.
Pese a que la investigación se alejó del entorno familiar, la madrina de Lola, Claudia Fernández,viajó hoy a Uruguay para aportar a la Justicia una cámara de fotos que tendría imágenes que confirmarían que la adolescente estaba viva el domingo 28 de diciembre, tal como declararon ella y su marido en sede judicial.
«Las fotos son del viaje, de la casa, de Lola y mi nieta. Con la muerte de la criatura y el estado anímico en el que quedaron, ni se dieron cuenta que las tenían», confirmó a TN su suegro, Jorge Tuzinkevich, padre de Hernán, el primer detenido que tuvo la causa.
El caso también tuvo repercusiones políticas. El futuro ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, cuestionó la cobertura de los medios argentinos. «Me llamó mucho la atención», afirmó.
«Yo no sé si los diarios argentinos, en una situación similar pero al revés, si hubiera muerto una chica uruguaya en la Argentina, le habrían dado tanta trascendencia como le dieron algunos diarios en la mañana de hoy, que publicaron hasta fotos del entierro en la primera página», deslizó el ex vicepresidente, que será el canciller de Tabaré Vázquez cuando asuma su segundo mandato.
Por otra parte, el intendente del departamento uruguayo de Rocha, Artigas Barrios Fernández, pidió «disculpas» porque su vocero de gobierno, Mario Barceló, había asegurado que el crimen de la adolescente fue producto de «violencia familiar en familias argentinas».
