Cientos de fieles participaron, en la jornada del jueves, de la santa misa donde se recordó la Última Cena del Señor oportunidad en la que Cristo instituyó la Eucaristía. Además, vivieron con intensidad el lavatorio de los pies, un acto de amor de parte de Jesús a sus discípulos.
En su homilía el padre Juan Castro Zavalía, párroco de la iglesia Cristo Rey señaló, «la iglesia celebra la institución de la Eucaristía hasta el regreso definitivo de Jesús».
Seguidamente apuntó, «el misterio pascual no se queda en el pasado. Todo lo contrario es un sacrificio que se actualiza permanentemente y domina todos los tiempos».
En referencia al lavatorio de los pies expresó, «Jesús, siendo Rey, se inclinó y como un esclavo lavó los pies de los pecadores»; a la vez destacó que este es un gesto importante de humildad y de servicio hacia los demás, gesto que todos los cristianos deberíamos imitar.
Por otra parte puntualizó, «con esta acción lo que nos dice Jesús es que el que no se lava a través del bautismo y demás sacramentos no tendrá parte con él».
Para terminar su homilia el padre Castro Zavalía convocó a toda la feligresía a reflexionar sobre el misterio pascual y reveer la actitud de cada uno, para recibir de la mejor manera la Pascua de Resurrección.
Finalmente los presentes participaron de la adoración al Santísimo Sacramento.