«E menos 5». Esa es la denominación militar que refiere al inicio formal de las operaciones del Comando General Electoral, una formidable maquinaria que reúne a poco más de 100 mil hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas y Fuerzas de Seguridad federales y provinciales. La frase en código significa en la práctica que con cinco días de anticipación al momento de dar inicio el acto comicial, las tareas logísticas en el terreno se dieron por iniciadas.
El corazón del Comando está montado en la sofisticada y moderna sala de situación que el Ejército Argentino posee en el séptimo piso del edificio Libertador General San Martín donde también reside el ministro de Defensa, Oscar Aguad, y el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, a cargo del Teniente General Bari del Valle Sosa.
Por estas horas, la tarea es intensa en el centro de comando que centraliza cuestiones heterogéneas que van desde la gestión de la habitabilidad para tropas movilizadas a lugares remotos, como al análisis del factor meteorológico en todo el país. El General de División Pérez Aquino explica los alcances de su labor.
—¿General, cuál es la responsabilidad primaria del Comando que Ud. encabeza?
—En forma sintética podemos decir que este Comando tiene la misión de garantizar la seguridad y tranquilidad de los comicios, para ello hay toda una tarea previa de planificación, un despliegue de las urnas, la presencia de personal en los lugares de votación y todas las tareas necesarias para que el acto electoral se desarrolle con normalidad. Nuestra responsabilidad se extiende posteriormente al cierre de los centros de votación a garantizar la seguridad en el traslado de las urnas al lugar del escrutinio definitivo.
—¿Quiénes integran el Comando Electoral?
—Este comando tiene la particularidad de estar integrado por hombres y mujeres de las tres Fuerzas Armadas, de las Fuerzas de Seguridad federales y provinciales desplegados en 24 distritos electorales.
—¿Cómo se asegura la comunicación del comando con personal ubicado en zonas remotas?
—Contamos con un sistema denominado redundante que permite asegurar las comunicaciones por más de un medio. Esto incluye desde telefonía celular hasta comunicaciones satelitales. Se suman también los medios propios de las Fuerzas Armadas, de esta manera se monta una red que nos permite estar en comunicación permanente con cada rincón del país en donde el comando tenga desplegada gente.
—¿Podría decirse que su tarea es netamente logística?
—En principio, sí, dado que implica el despliegue de una enorme cantidad de gente, la parte táctica está dada por el afianzamiento de la seguridad en el comicio y evidentemente la estrategia es garantizar la realización de algo tan importante para el país.
—¿Cuáles son los preparativos que el comando enfrenta por estas horas?
—En este momento tenemos instalados todos los puestos de comando, y estamos en pleno desarrollo de algo tan pintoresco como lo es la distribución de urnas con mulas.
—¿Mulas?
—En determinadas zonas de Salta, Jujuy y Tucumán la única forma de llegar con las urnas es a lomo de mula, son lugares muy muy alejados.
—¿Pero quién porta la urna a lomo de mula, el correo?
—Lo hace el personal de las Fuerzas Armadas y el personal del Correo acompaña. Luego del comicio las urnas se repliegan al mismo lugar de donde partieron y de allí al lugar central del escrutinio definitivo.
—¿Cuándo empieza el reparto de urnas en las grandes ciudades?
—El día sábado de madrugada a efectos de asegurar que a las 8 del día anterior al acto electoral, ya estén resguardadas en un local cerrado y precintado de cada centro de votación y obviamente custodiadas por el Comando General Electoral.
—¿Teniendo en cuenta que no es habitual que el personal militar se despliegue en centros urbanos, considera usted que están aptos para la tarea? ¿Cómo garantiza el éxito de la misión?
—Trabajamos con instrucciones precisas en cuanto a reglas de comportamiento a ser observadas por cada miembro del Comando Electoral, se hacen prácticas puertas adentro de las unidades militares y luego de verificada la aptitud se avanza
—¿Con qué otros organismos interactúa el Comando a su cargo durante estas jornadas?
—Trabajamos codo a codo con la Cámara Nacional Electoral, la Dirección Nacional Electoral del Ministerio del Interior y además en la sala de comando habrá enlaces de las distintas fuerzas de seguridad federales.
—¿Qué contingencia puede tener que neutralizar su Comando?
—Básicamente, algún tipo de disturbio o violación al código electoral; en esos casos se actúa rápidamente solicitando además la presencia del delegado de la Justicia electoral presente en cada lugar. De tener que detener a un infractor, el mismo es inmediatamente retirado del lugar y puesto a disposición de la autoridad policial correspondiente.
—¿Cómo se solventan los gastos operativos del Comando Electoral?
—No son gastos que se imputen al presupuesto de las Fuerzas Armadas, todo se solventa con partidas dispuestas a este efecto por la Dirección Nacional Electoral.
—¿Cuándo se desmoviliza el Comando Electoral?
—La tarea post comicio tiene dos fases, la primera termina cuando todas las urnas llegaron y están aseguradas en el recinto donde se realiza el recuento definitivo, en ese punto, el personal afectado a la tarea se reduce drásticamente quedando afectado solo el necesario para asegurar el perímetro, y finalmente esta guardia se levanta cuando la Justicia da por terminado el recuento de votos.
—¿Este mismo procedimiento se montará en octubre o se evalúan cambios?
—Lo ideal sería que fueran los mismos hombres, distribuidos en los mismos locales y cada uno con la misma misión.
Sobre el final de la entrevista, el General Pérez Aquino ofreció una recorrida por el recinto en la que detalló el equipamiento informático con el que se cuenta, el que llega incluso a la adquisición por parte del Ejército de un moderno sistema de trackeo denominado «spot», que consta de unos 380 dispositivos que se ubicarán en los troncales de recolección de urnas y permiten monitorear en tiempo real dónde se encuentran los distintos componentes de custodia de las urnas una vez que estas se dirigen al centro de almacenamiento general.
La designación de Pérez Aquino obedece a que en la actualidad detenta el cargo de Comandante Operacional del Estado Mayor Conjunto y como tal es el responsable de cualquier despliegue de tropas tanto dentro como fuera del territorio nacional.