Diego Schwartzman había jugado dos veces en el año ante Nicolás Jarry. Y las dos veces le había ganado en sets corridos. En un partido que era una brasa muy caliente para el equipo argentino de Copa Davis, el 15° del mundo sacó a relucir su jerarquía para vencer a un agotado número 1 chileno por 6-4 y 6-4 en una hora y 38 minutos y prolongar la ilusión de la victoria en el quinto punto que jugará Guido Pella ante Christian Garín.
Un Schwartzman a toda máquina comenzó el partido. Dos quiebres consecutivos le dieron una cómoda ventaja de 4-0. El descontrol de Jarry fue evidente. Y también algunos síntomas de cansancio. Aunque cuando pudo tomarle el pulso a los cambios de ritmo de su adversario, se le acercó en un break. Sin embargo, a la hora de cerrar el parcial, a Schwartzman no le tembló el pulso y un revés largo del chileno estableció que el primer capítulo quedara para el local.
El segundo set fue una quiniela. Ansiedad, cansancio, nervios. Jarry sacó ventaja dos veces con quiebres en el cuarto y sexto games. Pero Schwartzman no se desesperó y se quedó con el saque del chileno en el quinto y séptimo. Y en el noveno también para quedar con la chance de sacar para igualar la serie.