La vicepresidenta electa Cristina Kirchner viaja a Cuba con el fin de visitar a su hija Florencia, quien se encuentra bajo tratamiento médico en ese país, y permanecerá en ese país hasta el próximo 11 de noviembre. Será el séptimo viaje de la ahora vicepresidenta electa a La Habana.
Al llegar al Aeropuerto de Ezeiza, la vicepresidenta fue abordada por un grupo de trabajadores aeroportuarios de la terminal área que la rodearon y, entre besos y selfies, la despidieron con eufóricas muestras de cariño. La imagen fue difundida por las redes sociales de Unidad Ciudadana.
A su regreso de la Isla, la espera una reunión con la vicepresidenta Gabriela Michetti para coordinar aspectos de la transición en la Cámara de Senadores que, no obstante, ya arrancó ayer en un encuentro con representantes de la ex presidenta, para fijar una agenda parlamentaria que continuará con otros encuentros la semana próxima.
Para realizar el viaje, la ex presidenta pidió permiso al Tribunal Oral Federal 2, que la juzga por supuestos delitos cometidos con la adjudicación de obra pública nacional en Santa Cruz durante su gobierno. Dadas las anteriores autorizaciones, no se descarta que solicite una ampliación del permiso por estar más días en la isla.
También lo hizo ante el Oral Federal 7, que quedó a cargo de preparar el futuro juicio por los cuadernos de la corrupción, causa en la que está procesada con prisión preventiva como supuesta jefa de asociación ilícita.
Para el próximo 5 de noviembre, la Cámara Federal de Casación fijó una audiencia para tratar su apelación al procesamiento y la prisión preventiva dictados por el juez federal Claudio Bonadio.
En el caso del juicio por obra pública en Santa Cruz, la actual vicepresidenta electa será indagada cuando concluyan las declaraciones de los demás enjuiciados junto con ella, en fecha a determinar por el Tribunal Oral Federal 2.