Más allá del duro enfrentamiento que tienen con el gobierno de Mauricio Macri por la posesión de tierras que reclaman como propias, las comunidades mapuches en la Argentina se debaten en estos días ante un dilema interno de difícil resolución inmediata: la defensa pacífica de una «Machi» sanadora y guía espiritual de todo el pueblo indígena frente a la violencia ejercida por el grupo de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).
La muerte del joven mapuche Rafael Nahuel del Lof Lafken Winkul Maipu tras un intento de desalojo de parte de la Prefectura en los terrenos de Parques Nacionales de Villa Mascardi no hizo más que cristalizar un debate interno que tienen los mapuches y que no saben cómo canalizarlo. Tampoco el Gobierno logró hasta ahora una receta para dilucidar este dilema, más allá de negociaciones fallidas o el uso de la fuerza. Pero la cuestión hoy es interna al pueblo mapuche. Durante toda la semana pasada en Bariloche las comunidades de todo el país debatieron de este tema sin llegar aún a una solución.
Según el relato que hicieron ante Infobae referentes de diversas comunidades mapuches de Río Negro, Neuquén y Chubut, la puja por las tierras de Villa Mascardi no es una pelea más en todo el historial de enfrentamientos que hubo con los gobiernos en los últimos años: allí decidió establecerse por «un llamado espiritual» la Machi o guía del pueblo. Se trata de una joven de 16 años que se llama Betiana Loan, los padres se encuentran con ella y, según dicen, expresa «poderes únicos»: cuenta con dones para lograr una sanación física y espiritual, se enferma mucho pero carece de problemas para vivir, habla otros idiomas desconocidos además del español o el mapuche y en menos de dos meses pasará de ser una «Machil» a una verdadera «Machi» que estará en condiciones de guiar a todo el pueblo, según sostienen.
«Esta es una situación que los que no conocen al pueblo mapuche no van a entender. Pero la Machi ha elegido ese sitio de Villa Mascardi como lugar sagrado para vivir, como pudo ser el Volcán Lanín, que también es sagrado. Y por primera vez en cientos de años el pueblo mapuche observa que hay una guía espiritual que hay que respetar y defender», dijo a Infobae Luis Pilquiman, presidente del Parlamento Mapuche de todo el país.
La «Machi» fue presentada esta semana en forma muy reservada ante la mesa de diálogo conformada por la Iglesia con la comunidad mapuche, el gobierno y referentes de los gremios y movimientos sociales. «Nadie la podía tocar y hay una movilización muy fuerte entre los mapuches por este tema», dijo uno de los integrantes de ese espacio de diálogo.
Amancay Quintripueo, de la comunidad mapuche Lof Kinxiwen, que se encuentra cerca de Villa La Angostura, también sostiene que «la aparición de una Machi en estas tierras no se registraba desde la época de la conquista del desierto y es por eso que todo el pueblo mapuche está movilizado».
A su vez, Miriam Liempe, que también forma parte del colectivo mapuche de Río Negro y representa a la CTA en la mesa de diálogo, explicó: «Estamos ante la presencia de una Machi que eligió las tierras de Villa Mascardi como sagradas para vivir y necesitamos como nunca esas tierras para que nuestra Machi crezca allí en paz. Por eso vamos a defender y a resistir como sea esas tierras».
El dilema que se abre allí es cómo defender esas tierras y hasta dónde llegarán los mapuches para mantener esa «causa nacional» de protección de la Machi. La defensa de esos terrenos ya le costó la vida a Rafael Nahuel y los nexos del Lof Lafken Winkul Maipu de Villa Mascardi con la RAM son más que visibles.Desde el Gobierno exponen pruebas: varios de los miembros de esa comunidad mapuche, como Fausto Jones Huala, es hermano de Facundo, que está preso y reivindica a la RAM desde la agrupación mapuche de Cushamen, allí donde falleció Santiago Madonado. No son los únicos nexos de esa comunidad con la RAM. También hay una conexión con el grupo violento de Chile denominado Comunidad Arauco Mapuche (CAM) ya que los mapuches de Chile defienden a la Machi de este lado de la Cordillera.
«La RAM es consecuencia de que el Estado no nos reconoce como pueblo ni reconoce nuestras tierras y la violencia es del Estado no de nosotros» expresó a este medio Jésica Milialonco de la comunidad La Waikeka, ubicada a unos 20 kilometros de Bariloche.
La tía de Rafael Nahuel, María, también defendió el uso de la violencia para defender a la Machi: «Vamos a resistir como sea», dijo en la protesta del jueves pasado en el Centro Cívico de Bariloche.
El dilema para muchos mapuches es que la forma violenta en que esta mostrándose la RAM deslegitima el reclamo de tierras que hacen, incluido el mayor pedido de asentamiento que es el de Villa Mascardi donde decidió instalarse la Machi como lugar sagrado.
En la mesa de diálogo, los referentes del Parlamento Mapuche y de las diferentes comunidades decidieron incluir en el acta un párrafo específico donde desconocen por completo a la RAM. Pero al mismo tiempo reconocen que Fausto Jones Huala es parte de la comunidad de Villa Mascardi.
En Bariloche, los mapuches de la RAM incendiaron hace unos meses los refugios de alta montaña de Laguna Jacob y el Neumeyer. Además, en el Club Andino Bariloche dijeron a Infobae que recientemente recibieron amenazas para quemar esa sede situada en plena ciudad. «No entienden que los montañistas tenemos el mismo espíritu de conservación de la tierra que los mapuches. Pero nos ven como enemigos», dijo un miembro de ese club de montaña.
El Ministerio de Seguridad tiene un informe reservado que contabilizó en los dos últimos años 77 hechos delictivos, atentados, incendios, privación de la libertad y amenazas a personas. la mayor parte de estos hechos fueron adjudicados a la RAM.
Hay más. Según un relevamiento que hicieron los comerciantes, empresarios y pobladores de Neuquén, hay más de 15 atentados a una de las zonas más preciadas de la economía argentina en estos momentos: los yacimientos petroleros de Vaca Muerta. La comunidad Kaxipayiñ realizó allí varias usurpaciones a terrenos de Los Barreales, hubo atentados de la RAM en el área que opera YPF en Loma de la Lata; la comunidad de Campo Maripe tiene una causa judicial por haber «plantado» cadáveres para justificar su «ancestralidad»; la RAM se acaba de reivindicar los ataques a un pozo petrolero de Pluspetrol; en el pozo Allen se encontraron artefactos explosivos con carteles de la RAM y la comunidad Peñihuen usurpó tierras con altos niveles de violencia en el Parque Industrial de Añelo. Se estima que un 50% de las tierras de Vaca Muerta son reclamadas por los mapuches y que YPF dejó de facturar unos 415 millones de pesos el último año por las usurpaciones y otros tanto el resto de las petroleras.
El desalojo de otras comunidades, como la de Villa Mascardi, está a flor de piel en toda la Patagonia. Según informes oficiales del INAI, hay 129 sentencias firmes en la justicia por pedidos de desalojo y un centenar más que esperan fallos judiciales. Ayer, el juez Guillermo Villanueva rechazó un pedido de amparo que presentó el Consejo de Abogados Indígenas de Río Negro por unas 10 comunidades. Temen que haya nuevos desalojos. ¿Responderán con el accionar violento de la RAM, habrá otro enfrentamiento sangriento con las fuerzas de seguridad, se refugiarán en los poderes de la Machi? Nadie lo sabe.
Fuentes allegadas al ministro de Medio Ambiente, el rabino Sergio Bergman, que decidió que Parques Nacionales no se sentara a la mesa de diálogo de Bariloche si antes no se desaloja la zona de Villa Mascardi dijeron a Infobae tajantemente: «No se negociará con grupos violentos. Se puede dialogar y cumplir la ley a la vez». Sólo que en hebreo, suele bromear Bergman, el orden es inverso: «Se debe cumplir con la ley primero para poder dialogar».