Tras 20 horas de trabajo, el intendente Pablo Mirolo evaluó los daños provocados por el violento temporal de viento, lluvia y granizo que castigó a la ciudad entre la tarde y noche del lunes.
“Desde que se desató la tormenta, y las primeras horas de la mañana de este martes, ha caído más de 70 milímetros de agua, pero sobre todo lo que ha afectado a la ciudad son las fuertes ráfagas de viento. Hubo una especie de tornado que afectó a la parte Noroeste de la ciudad, donde se encuentran los barrios Matadero Viejo, Villa Suaya, San Javier, Dorrego, todo el sector de la Ruta 34, barrios Gorrini y Cabildo Santiagueño «, dijo el mandatario.
“Las cuadrillas de operarios trabajaron en levantar los árboles caídos como así también el tendido eléctrico, con el objetivo de mejorar la transitabilidad y establecer las medidas de precaución en zonas peligrosas», subrayó.
Mirolo también destacó, «los desagües trabajaron muy bien, ya que durante todo el año se ha trabajado en la construcción y limpieza de estos, como en la colocación de bombas mecánicas que han trabajado correctamente”, remarcó.
Por último, expresó: “el lunes por la noche teníamos 40 evacuados y ahora tenemos 23, en el CIC San Carlos. Seguimos trabajando para aquellas familias que lo requieran; será una tarea que demandará varias jornadas hasta normalizar la situación en las zonas perjudicadas. Pero por suerte no hemos tenido que lamentar tragedias, solo daños materiales».