Días pasados el joven bandeño Nahum Lee Lockett, hijo de uno de los grandes ídolos que tuvo el Club Ciclista Olímpico Phillip Lockett, se recibió en Estados Unidos de Científico en Computadoras.
A través de las redes sociales Nahum, nacido y criado en la ciudad de La Banda señaló, «no importa a donde esté, a donde haya llegado, ni lo que haya conseguido. No importa lo que haga, nunca me voy a olvidar de mis raíces».
Seguidamente puntualizó, «gracias a mis raíces soy el hombre que soy hoy. Mi patria querida y mi Santiago y sobre todo la República de La Banda, siempre en mi corazón! Para todos los que creían en mí, que me apoyaron en la tierra y en el cielo. Eternamente agradecido. Soy Científico en Computadoras».
Por otra parte Lockett recordó, «con 18 años, recién terminado la secundaria, con mucha ambición y sueños por delante había tomado una de las decisiones más difíciles de mi vida, dejar todo lo que había construido por 18 años, todo a lo que estaba tan acostumbrado, por venir a Estados Unidos y empezar de cero».
Más adelante añadió, «tenía tanto miedo al principio, porque no sabía lo que me esperaba al otro lado de la puerta que había decidido abrir. Los primeros 2 años fueron los más difíciles de mi vida. Caída tras caída, fracaso tras fracaso, desilusión tras desilusión».
«Muchas veces llegué a pensar que era mucho peso para mí, pero al mismo tiempo, pensaba en mi familia, mis amigos que confiaban en mí; y eso hacia que siga adelante a pesar de todo», sostuvo el joven profesional.
A la vez manifestó, «dos años, donde conocí lo que es estar en el fondo, y no saber qué hacer. Hasta que todo lo que me sucedió dio frutos y en el 2013 empecé mi carrera universitaria. No conocía a nadie, no sabía lo que me iba a esperar, no sabía como funcionaba el sistema educativo, al menos no por completo».
Días previos a recibirse Lockett escribió, «desde el primer día me dije que no iba a desperdiciar la oportunidad, que no importa lo que este en frente mío, lo voy a conquistar, lo voy a lograr a como de lugar. Y ahora, luego de 4 años difíciles, llenos de altos y bajos, de alegrías, tristezas, desesperación, nerviosismo, ansiedad, etc. Puedo decir que me voy a graduar con honores, a pesar de haber sido parte del equipo de basket de la Universidad, de jugar para otro equipo hispano, de trabajar y hacer servicio comunitario, hasta de ser tutor para estudiantes universitarios, a pesar de todo, nunca pedí un trato especial, ya sea por mi nacionalidad, o por tener inglés como segundo idioma, ni mucho menos por tener menos tiempo que los demás».
Finalmente manifestó, «nunca puse ninguna excusa, no existen las excusas, son solo dicisiones que cada uno toma en la vida. Nunca renuncies a tus sueños, hacé el resto de tu vida lo mejor de tu vida. Aguante la Mazamorra».
