La Justicia comercial embargó un departamento contiguo a la sede de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, cinco cuentas bancarias y varios elementos de la propia sede de la entidad.
La resolución fue dictada luego de un pedido de los acreedores de la Fundación, proveedores que reclaman pago a cheques rebotados por trabajos realizados para las obras de construcción de viviendas a través de la Misión Sueños Compartidos.
Según informa el diario Clarín, el embargo del departamento fue decretado por el juez Federico Güerri sobre la Unidad Funcional 16 del edificio ubicado en Hipólito Yrigoyen 1578, frente a una de las plazas que se encuentran entre el Congreso y la Avenida de Mayo. El inmueble era utilizada por los abogados de la Fundación.
El juicio ejecutivo fue iniciado por la firma M y C Los Primos SRL, un corralón de materiales que trabajaba para las obras de vivienda de las Madres y que se quedó sin cobrar varios cheques. En este juicio la deuda es por 71.243 pesos, más 21.372,9 calculados preventivamente por intereses y gastos del juicio.
Además, los abogados de esa empresa estuvieron el miércoles pasado en la sede de la Fundación para ejecutar otro embargo dictado por otro magistrado en una causa similar. En esa ocasión, interdictaron computadoras, el equipo de aire acondicionado y equipos de audio, entre otros bienes. Los elementos permanecen en la asociación pero quedan a disposición de la Justicia para un eventual remate a través del cual se cobre la deuda o parte de ella.
Además, en otros de los juicios abiertos contra la Fundación, se embargaron cinco cuentas bancarias. Lo extraño del caso es que en la que más dinero había era en la del Banco de Santiago del Estero, que tenía 9.167 pesos. En una del Banco Ciudad y en otra del Credicoop había la misma cantidad de dinero: 783,38 pesos.
En tanto, en la del Banco Provincia directamente no hay fondos y el Banco Chaco todavía no informó sobre la cantidad de dinero en la cuenta allí existente a nombre de la Fundación.
Aunque no hay información oficial, se estima que la deuda acumulada por la Fundación alcanza los 40 millones de pesos, aunque no todos los acreedores iniciaron demanda.
