Víctor Omar Martínez había declarado en el juicio que investiga la muerte del obispo Ponce de León ocurrida durante la dictadura.
Ayer, el Gobierno había pedido la colaboración de la ciudadanía para encontrar al testigo, de 52 años, ante el temor de que se trate de un nuevo «caso López».
Sin embargo, anoche, la ministra de Seguridad, Nilda Garré, a través de su cuenta oficial de twitter, confirmó la aparición de Martínez.
La noticia también fue ratificada a Infobae.com por fuentes de la Comisaría 11, de Caballito. Garré, además, indicó que un médico legista evaluará el estado del testigo.
Martínez había sido visto por última vez el lunes pasado a las 14, cuando salió de su casa del barrio porteño de Palermo hacia una escribanía a la que nunca llegó, según denunció la familia.
La presidente Cristina Kirchner ordenó que todas las fuerzas de seguridad trabajaran para localizarlo, según informó ayer el ministro de Justicia, Julio Alak, en una conferencia de prensa en la que distribuyó una fotografía del testigo y pidió colaboración de la población.
Garré, por su parte, había ordenado la creación de una división especial integrada por la Superintendencia de Interior y Delitos Federales Complejos para investigar la desaparición y habilitó una línea telefónica especial para recibir información: 0800 555 5065.
Ponce de León murió en circunstancias sospechosas en un supuesto accidente automovilístico el 11 de julio de 1977, en plena Dictadura, cerca de la ciudad bonaerense de Ramallo.
En la investigación por la muerte, en la cual Martínez declaró como testigo, el principal imputado es el ex teniente coronel Manuel Fernando Saint Amant, procesado en varias causas de desaparición de personas.