En marzo de este año la UE suspendió la aplicación de las reglas previstas en ese Pacto, en particular la norma que obligaba a los países a respetar rigurosamente un déficit público inferior al 3% del Producto Interno Bruto (PIB).
Con la suspensión de esa normativa, los países estuvieron en condiciones de utilizar miles de millones de euros en refuerzos de sus sistemas públicos de salud y ayuda a empresas o mercados de trabajo para enfrentar la epidemia de Covid-19.
A inicios de septiembre, el alto comisario de la UE para Economía, Paolo Gentiloni, había evitado mencionar un plazo para que el Pacto vuelva a ser aplicado.
En la visión de Beaune, «no podremos reponer el Pacto tal como lo hemos conocido antes porque estamos en un período en que será necesario, aún más que antes, invertir en nuestras economías».
A la salida de pandemia, añadió el funcionario, «tendremos aún más deuda, que serán muy diferentes a las del mundo que conocimos hace unos pocos años en toda Europa».
Ámbito