En el Día Mundial contra la Trata de Personas, la hermana María Solange Ostane perteneciente a la congregación las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, se refirió al tema como “pandemia social con causa invisible” y dio a conocer el trabajo que se desarrolla en concientización y prevención.
En diálogo con LA BANDA DIARIO, la hermana Solange señaló: “A la trata de personas la denomino una pandemia social con causa invisible y lo decimos así porque es intratable incurable esta enfermedad social y lo que nos puede salvar, como en la pandemia de coronavirus, son las prevenciones”.
“No podemos saber exactamente donde hay trata de personas –continuó- ni quien lo lleva adelante, entonces nos quedan las prevenciones que podamos tomar para protegernos”.
Respecto a qué se considera trata de personas, la religiosa indicó que tiene tres fases. “La primera es la captación; las personas que la promueven van a un lugar específicamente pobre para ofrecer trabajo o convencer a un joven y sus padres sobre tener una vida mejor. Las personas humildes, que no saben mucho de esas cosas confían y allí pasamos a una segunda fase que es el traslado”.
“Mayormente te ofrecen un trabajo en otro lugar, puede ser de una provincia a otra o de un país a otro, las transportan por distintos medios y al llegar a este nuevo lugar son explotados y allí ingresamos en la tercera fase”.
También especificó: “Esta tercera fase conlleva la explotación laboral, pueden ser niños al servicio de un grupo de personas, la otra es la explotación sexual donde mayormente llevan a niñas, ahora se está dando que raptan a niñas de 12 años. A eso se suma el tráfico de órganos donde lamentablemente llegan a matar a las personas; esto ha hecho que muchas familias pierdan a sus seres queridos. Realmente necesitamos corazón y misericordia para poder trabajar contra este flagelo mundial”.
En ese contexto puntualizó: “Nuestro trabajo de vida consagrada por una sociedad sin trata es la prevención. Ayudamos a las personas a conocer lo que es trata de personas y a saber protegerse por su propio medio. En Santiago del Estero no tenemos muchos contagios de coronavirus y ojalá tampoco los haya de trata de personas; si no los hay bendito sea Dios decimos como iglesia y si por si acaso se dan tomamos precauciones informando que es la trata de personas, sus metodologías, para proteger a los niños, jóvenes y adultos que a veces por situaciones difíciles aceptan una oferta laboral y cuando llegan a ese lugar se dan con otra cosa y entonces deben trabajar en contra de su voluntad y eso se llama esclavitud moderna”.
Redes sociales
Respecto a la utilización de las redes sociales para captar la atención de las posibles víctimas, la hermana Solange comentó: “Las redes sociales son medios de captación virtual que lleva a la captación física. Mayormente se dan citas porque tienen que sacar a la persona de su espacio para continuar con las otras fases”.
“En las redes sociales –continuó- encuentran a la población más vulnerable niños y jóvenes que ante cualquier oferta son atraídos por inocentes”.
Asimismo explicó que la trata de personas se puede dar en cualquier extracto social, pero a nivel mundial se da más en medios sencillos donde hay pobreza o personas que por diferentes circunstancias han tenido que dejar su país, ya sea por persecución, conflictos internos o situaciones políticas. Hay personas que estaban bien en su tierra y ante conflictos debieron desplazarse quedando así sin seguridad y vulnerables.
Red Kawsay
La hermana María Solange Ostane forma parte, en el NOA, de la Red Kawsay que significa “Vive todavía” porque la persona víctima de trata moralmente puede sentirse morir, pero a la vez y con ayuda puede recobrar su vida.
“Esta Red Kawsay nace para que estas personas puedan tener vida: Esa vida en abundancia que Dios vino a traer no es para unos pocos sino para todos, especialmente para los pobres y los tenemos que cuidar contra este flagelo; porque no entienden mucho de estas cosas sociales y se les puede engañar fácilmente porque creen y confían”, explicó la religiosa.
Finalmente pidió: “A esas personas que tienen esas intenciones, pido de rodillas, que cesen por favor, hay muchas actividades que el ser humano puede hacer, este no es el mejor medio para tener una opción de vida. Yo creo que no necesariamente tenemos que hacerle daño a otro para vivir yo. Eso se llama egoísmo y eso hace sufrir”.
Las personas que deseen ampliar conocimientos sobre este tema, pueden acercarse a la parroquia Nuestra Señora de Lourdes, donde la hermana Solange colaborará brindando la información requerida.
