Calmada y sin ninguna emoción, así fue como Tiffany Moss escuchó que recibirá la inyección letal por matar de hambre y después quemar el cuerpo de su hijastra de 10 años, en Lawrenceville, Georgia.
La mujer de 36 años fue condenada a la pena de muerte por el asesinato en 2013 de Emani Moss hija de su pareja sentimental Eman Moss, quien cumple una sentencia de cadena perpetua por complicidad en el homicidio.
La pequeña Emani de 10 años fue confinada por Tiffany a una habitación de su departamento, donde la mantenía sin comida o agua, pero sí rodeada de basura.
Los fiscales del caso informaron que la niña pudo tardar en morir semanas y durante sus últimos días ya no podía moverse por su debilitada complexión; al momento de su deceso tan sólo pesaba 32 libras.
Tras la muerte de Emani Moss, su padre y madrastra tomaron su cuerpo, lo metieron en una bolsa y en un bote de basura, donde le prendieron fuego con la intención de ocultar el crimen.
La madre de dos hijos se representó así misma ante el jurado, pero no presentó pruebas o testigos a su favor; incluso cuando el juez le preguntó si quería decir algo para su defensa, ella tan sólo respondió: «no».
Uno de los testimonios presentados por la fiscalía fue el de Eman Moss, padre de la víctima y quien confirmó su participación al quemar el cuerpo de la menor de edad. El hombre cumple con una sentencia de cadena perpetua por este caso desde el 2015.
Atlanta Journal-Constitution informó que fue el fiscal de distrito de Gwinnett, Danny Porter, quien pidió al jurado elegir la pena de muerte para Tiffany Moss, en lugar de otro tipo de sentencia.
«Ella ha mostrado demasiado de su capacidad para la crueldad. Siempre habrá ese lado oscuro a la espera de salir», mencionó Porter.
El mismo fiscal calificó a la acusada como «la madrastra malvada» y al caso como «una historia de Cenicienta que salió terriblemente mal».
Tras escuchar todos los elementos, el jurado compuesto por seis hombres y seis mujeres decidió condenar a muerte a Tiffany Moss, por los delitos de asesinato, crueldad con los niños y ocultar el crimen.
Tiffany es actualmente la única mujer que espera su ejecución al recibir una inyección letal entre el 7 y el 14 de junio, aunque la fecha podría aplazarse por la apelación que presentarán los abogados de reserva asignados para esta defensa. También se convertirá en la tercera en recibir una sentencia mortal en Georgia.
