La figura del automovilismo mundial que nació en Francia, pero pelea por correr con los colores de Argentina: “Es lo que siempre soñé”

El documento de Sacha Fenestraz dice que es francés, pero su corazón es absolutamente argentino. El piloto de 24 años es una de las figuras actuales del automovilismo mundial, con una destacada estadía en la Fórmula 3 Japonesa y muchas expectativas puestas sobre su desempeño en la temporada en la Fórmula E que se avecina. Nació en Annecy, un pueblo alpino del sureste de Francia, pero desde los seis meses de vida se crió en Córdoba y él pelea porque su auto lleve los colores del país que lo formó.

En un hilo que realizó en la red social X, el piloto de 24 años explicó que continuará buscando la forma de portar la bandera en su monoplaza. “Sinceramente no lo sabía, pero al ser un campeonato del mundo tiene otras reglas… Haré todo lo posible por solucionarlo durante la temporada y así poder correr con mi querida bandera Argentina arriba del auto como siempre lo soñé”, aclaró. Y sobre este punto, el corredor que se crió en Santa Catalina –cerca de Colonia Caroya–, detalló: “Acá está lo que dice el reglamento con respecto a este tema. 9.4.2 Todos los conductores, independientemente de la nacionalidad de su licencia, que participen en cualquier competición del Campeonato Mundial de la FIA, conservarán la nacionalidad de su pasaporte en todos los documentos oficiales, publicaciones y ceremonias de entrega de premios”.

El hilo explicando su deseo de lucir los colores argentinos

Este piloto de Nissan que se prepara para su segunda temporada en la Fórmula E es hijo de Stephanie, una corredora francesa que corrió el Dakar en 2009 y 2010, que decidió subir a su hijo a un karting a los 3 años. Raoul, su padre, optó radicarse con la familia en Córdoba donde tuvo exitosos emprendimientos hoteleros y turísticos. Hoy, el heredero de los Fenestraz es uno de los argentinos más representativos a nivel mundial en el automovilismo junto con Franco Colapinto (Fórmula 2) y Agustín Canapino (IndyCar) como nombres rutilantes.

En las últimas semanas se conoció que Sacha está bajo la órbita de un equipo de la Fórmula 1: “En 2024 seguiré un año más con Nissan y a la par estoy trabajando con un equipo de Fórmula 1 en su simulador para potencialmente tener una prueba el año que viene. Lo bueno es que podré tener la Superlicencia, ya que tenía los puntos vigentes. Ya firmé todos los papeles hace un par de meses atrás, así que viene un lindo año”, le explicó a Infobae.

Se formó en los kartódromos de Colonia Caroya y en el de Jesús María. Con 13 años partió a Europa para correr en karting y en 2015 debutó en autos: compitió en la Fórmula 4. En 2017 fue campeón de la Fórmula Renault Europea. En ese momento integró el programa de desarrollo de pilotos de Renault F1, pero a fines de 2018 lo desafectaron porque no cumplió con los resultados esperados en la Fórmula 3 Europea, pero no contó con un buen auto con el equipo Carlin. En 2019 se mudó a Tokio y logró el título de la Fórmula 3 Japonesa. Luego corrió en la élite de ese país asiático, en el Súper GT y la Súper Fórmula, que detrás de la F1 es una de las dos categorías de monopostos más importante del mundo junto a la IndyCar. Fue subcampeón de la Súper Fórmula en 2022 y luego pasó a la Fórmula E, en un desafío distinto e importante al correr en una divisional en la que debe administrar la energía en las carreras, ya que los autos son eléctricos.

El casco especial que se mandó a hacer