«Cualquier interferencia en la elección de autoridades de la AN por parte del Poder Ejecutivo o el Poder Judicial implica el desconocimiento absoluto de los principios esenciales de la democracia, que son la separación e independencia de poderes», dice un comunicado emitido por la OEA.
«A ello se le suma dejar a un lado la legitimidad que el pueblo de Venezuela le dio a la AN y, por lo tanto, se estaría consagrando un paso más en la consolidación de un régimen autoritario», agrega la nota, publicada en el sitio web del organismo continental.
El documento insta a «los poderes del Estado venezolano y principalmente al Poder Ejecutivo del país caribeño a respetar la normativa interna de la AN para la elección de su junta directiva, que deberá asumir funciones el 5 de enero de 2017».
Venezuela vive un conflicto de poderes desde que el 5 de enero de este año asumieron los diputados electos el mes anterior.
Desde entonces, la AN tiene amplia mayoría opositora y se convirtió en el primero de los cinco poderes constitucionales del país que no está bajo control del chavismo desde que éste llegó al gobierno a comienzos de 1999.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro neutralizó la acción del parlamento a través de su dominio del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que con más de 40 sentencias dejó sin efecto la sanción de numerosas leyes e incluso declaró nulos todos los actos del Legislativo.
La AN se apresta a renovar sus autoridades, que tienen mandato anual -el de los diputados es por cinco años-, y por acuerdo dentro de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) opositora, el actual jefe de su bloque, Julio Borges, sucederá a Henry Ramos Allup como presidente del parlamento.
Fuente: Telam