Laura Fidalgo es una de las bailarinas más conocidas del país. Sin embargo, todo el tiempo trabaja para no ser famosa sólo por esa faceta. Vedette, actriz, coreógrafa, profesora y empresaria, son algunos de los oficios u ocupaciones que completan su currículum. Mucho más desde 2014, cuando sufrió una lesión en los ensayos para el «Bailando por un sueño» de ese año. Fidalgo se rompió los ligamentos y desde entonces, gran parte de su vida cambió.
“Hoy bailar al 100% no puedo. Me operé y después hice la rehabilitación, pero no estoy del todo bien. Se puede mejorar, pero falta. Me tiene súper angustiada. Me levantaba todas las mañanas a entrenar, a la tarde daba clase y a la noche teatro. Todo el tiempo movimiento y baile, desde que era chica. De esa rutina, a nada”. Así explica la artista en charla con DiarioShow.com el momento que atraviesa.
Sin embargo, esa necesidad de mantenerse en movimiento fue la que la llevó a hacer diferentes tareas: “Es un trabajo de aprendizaje, sentir que por algo me pasó. Estoy ocupadísima con varias cosas, pero no es lo mismo estar arriba de un escenario bailando. Esa energía del baile no la tengo. Me concentro gestando, siempre fui generadora de todo lo que hago.
«Tuve siete escuelas y hoy, por como está el país, me queda la de Belgrano, otra en Corrientes y ahora abro una más en Posadas. Produje obras en las que me ocupé de todo. Cuando tengo las muestras a fin de año de las escuelas, me van a ver en la cabina dirigiendo luces y sonido. Siempre presente, hasta en el más mínimo detalle”.
Al hablar de esa versatilidad, explica que “nunca tuve la cabeza de la bailarina, sino de deportista. Me aburre la bailarina solamente. Si no no hubiese tenido siete escuelas, no hubiese producido. El problema es que acá la gente suele encasillarte. Yo soy Laura, y hago esto, esto y esto. Soy todo terreno. Desde ordenar, armar, producir, idear, todo. No sólo sobre el escenario».
«Trabajo desde los 15 años, soy de familia de clase media así que siempre ayudé a mi entorno, por eso tengo valores de trabajo, honestidad y nobleza, siempre seré fiel a lo que siento y lo que quiero. No transo con lo que no me gusta, me costará más todo, pero elijo el camino libre. Eso es impagable. Siempre elegí el respeto y los valores. Cuando con algo no comulgo agarro mis cosas y me voy”, explicó.
En un ambiente lleno de prejuicios, ¿cómo hacer para mantener esa posición? Fidalgo asegura que nunca fue fácil. “Siempre me trataron de loca. No dejo que me falten el respeto, en su momento cuando Tinelli te decía ‘te corto la pollera’, le decía ‘no, a mí no me la cortás’. Fui la primera. Me pareció agresivo. Si veo algo malo, o te quieren acosar, o te tocan de mala manera, chau. Primero te denuncio y después te insulto, y me voy, no me quedo en el mismo lugar».
«Pese a lo que sea y pese a que me muera de hambre, voy a buscar otro laburo. Las cosas no son todas iguales. Acá es todo cuánto tenés, cuánto valés. Todo muy hipócrita. Cuando tuve peleas mediáticas, frené a todos los que me decían algo inapropiado en cámara. Mi abuelo decía ‘mentí que te creen’, pero yo siempre voy con la verdad», afirmó.
«Existe fantasía porque uno vende una magia en la televisión a tal punto que algunos piensan que estás todo el día con las botas bucaneras y el vestido cortito. Pero no es así, yo estoy en chinela y sin maquillar como cualquier mujer. Está bien vender la fantasías pero hay que tener en claro que es un trabajo más”, aseguró Laura.
Contra todos
Laura, que protagoniza el filme «No llores por mí, Inglaterra» desde hace algunas semanas, cuenta que desde su niñez todo fue complicado: «De chica decía que quería ser bailarina y me decían bueno ¿pero qué más? No creían que fuese una carrera. Yo peleé contra eso. Me decían que tenía pie plano, que era alta y no podía bailar, que no servía. Me lo banqué por diez años. Pero el amor de mis viejos y de mi familia fue contenedor. Que la vida es divina, es mentira. La vida es obstáculo. Creo que está en la inteligencia de cada persona saber cómo pasarlo, saltarlo. Podés ser muy culto pero no tener inteligencia para la vida. Eso de ‘soy artista’ no lo soporto. Soy Laura de mis viejos. Soy una guerrera nata’».
