La maternidad fue un tema que sobrevoló la relación de Laurita Fernández y Nico Cabré durante los tres años de noviazgo. Desde el inicio, la actriz manifestó que él le había despertado las ganas de tener un hijo. Cuando tuvieron una crisis en 2020, incluso, ella confesó que él había cambiado rotundamente sus «planes de vida», lo que pareció que algo del proyecto en común se había caído.
Ante esta nueva separación, que parece ser la definitiva, Laurita no contó exactamente cuáles fueron los motivos, pero en una entrevista con Gente remarcó que la maternidad sí fue un punto de desacuerdo, al menos al inicio del vínculo.
«Al principio de la relación lo hablamos con Nico, es un tema que se charló porque no estábamos muy de acuerdo con los tiempos… Pero después lo resolvimos, por eso seguimos adelante con la relación cuando recién nos conocíamos. Quisiera ser mamá más adelante, tengo el deseo pero nunca me imaginé a esta edad con un hijo», contó.
Luego describió qué le gustó del actor: «Es super presente, eso me gustaba. Por eso es que también en su momento me animé a plantearlo, me nació el deseo de proyectar con él, un lugar, una familia, de decir: ‘sí, es él’. Y después no se concretó pero por supuesto que sus acciones, su personalidad, su manera de ser padre hace que a mí, en ese sentido, en ese punto, me inspiraron amor, confianza, admiración, porque sí es un papá muy amoroso».
Por último, Laurita dejó en claro que ese deseo de formar un hogar sigue siendo algo suyo, más allá de la separación. «Te puedo hablar de mi mamá, nos dedicó su vida. Ella me llevaba y me traía al cole, lo mismo con danza y teatro. Me iba a buscar en la loma del traste. Siempre me apoyó, me acompañó y me ayudó a encontrar mi vocación. Ojalá el día de mañana pueda ser un poco lo que ella fue conmigo. También que viva rodeado en un ambiente cálido y amoroso. Porque creo que los nenes son una esponja en todo sentido, para lo bueno y para lo malo», describió.
Fuente: ratingcero
