Un sabroso bife de lomo con papas fue la estrella de la noche en la embajada en Washington. Pero no fue la única. Funcionarios argentinos y norteamericanos, algunos de ellos estrechos colaboradores de Donald Trump, compartieron anoche junto a empresarios, productores, importadores y representantes de los organismos multilaterales una cena típicamente argentina en la sede de la avenida New Hampshire,regada con malbec mendocino y amenizada con un espectáculo de tango.
¿El motivo? celebrar un importante logro comercial: el hito de haber vuelto a colocar, después de 17 años de ausencia, carne argentina en el mercado estadounidense. El primer embarque se produjo el hace algo más de un mes. Llegó en un contenedor al puerto de Filadelfia y el embajador argentina, Fernando Oris de Roa, fue en persona a recibirlo. Pero faltaba el festejo oficial.
Un centenar de invitados acompañaron anoche a Oris de Roa en la embajada argentina, entre ellos la secretaria de Transporte de Trump, Elaine Chao, a quien se vio disfrutar del show de tango; Sergio De la Peña, subsecretario de Defensa para el Hemisferio Occidental; Kimberley Breier, subsecretaria en la oficina para América Latina del Departamento de Estado; CJ Mahoney, vice representante de Comercio de Estados Unidos, y funcionarios y diplomáticos con responsabilidad sobre áreas ligadas al sector cárnico.
El embajador abrió los discursos de la noche para resaltar en perfecto inglés el «enorme valor simbólico, además del beneficio económico» del primer embarque de carne argentina a Estados Unidos. «Ese es el camino», dijo. Hubo copas en alto y luego hablaron el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Guillermo Bernaudo, y el presidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPVCA), Ulises Forte. Ambos expresaron su satisfacción por el logro comercial y destacaron el potencial exportador de la Argentina. El mercado norteamericano se había cerrado a la producción nacional en 2001, por un brote de aftosa, y la reapertura demandó años de esfuerzos y negociaciones que atravesaron varios gobiernos argentinos y distintas administraciones en los Estados Unidos.
«Para ser humildes no voy a decir que tenemos la mejor carne del mundo, pero sí que estamos en condiciones de competir con los mejores», cerró Forte. La cadena Whole Foods, del multimillonario Jeff Bezos, dueño de Amazon, tiene interés en iniciar compras de carne argentina de alta calidad. En estos días podría haber avances en esa negociación.
Siguieron los brindis mientras en las mesas del salón oval de la embajada los invitados comprobaban ya la calidad del lomo argentino. Oris de Roa sentó a la secretaria Chao a su lado en la mesa central, junto a los principales funcionarios norteamericanos y argentinos y a James Scriven, CEO de BID Invest, brazo del BID para el sector privado.
En otras mesas se ubicaron Susan Segal, del Atlantic Council, Mario Ravettino, vice presidente del IPCVA, Julie Potts, presidente y CEO del Instituto norteamericano de la Carne, representantes de productores y frigoríficos argentinos, y funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento de Estado.
Bernaudo señaló luego que los primeros embarques al mercado estadounidense, el principal mercado importador, son cortes de calidad media, destinados a su procesamiento para la elaboración de hamburguesas.
En el futuro, dijo el funcionario, la expectativa es poder exportar cortes de mayor calidad.Pero antes de pensar en eso se debe cumplir con la cuota de 20.000 toneladas comprometidas, observaron a Infobae cerca del funcionario. No habría inconvenientes en cumplir con esa meta, aseguraron con optimismo.
