La violenta represión del régimen castrista a las masivas protestas que tuvieron lugar el domingo pasado en la isla -que terminaron con decenas de detenidos y desaparecidos- generaron una ola de repudio entre los principales dirigentes políticos de la Argentina y de la región.
En sentido contrario al presidente argentino, Alberto Fernández, que evitó condenar la violación a los derechos humanos en la Isla y dijo “desconocer” lo que allí ocurre, el ex mandatario respaldó el reclamo del pueblo cubano.
“Quiero apoyar al pueblo cubano que salió a las calles para reclamar el fin de la dictadura y que mejoren con urgencia sus condiciones de vida. Quiero que sepan que todas las personas del continente y del mundo que compartimos el valor de la libertad los acompañamos. Apoyemos a Cuba. SOS Cuba, estamos con ustedes”. Así, con un mensaje escueto pero contundente, Macri fijó su posición respecto de lo que ocurre en Cuba.
El ex jefe de Estado marcó así claras diferencias con el presidente Alberto Fernández, quien el lunes sorprendió al señalar: “No conozco exactamente la dimensión del problema en Cuba”.
Alberto Fernández dijo: “No conozco exactamente la dimensión del problema en Cuba”
En las últimas horas, la oposición en Argentina condenó con dureza la represión de la dictadura en Cuba y criticó la posición de Alberto Fernández.
Los presidentes de los tres principales partidos de la oposición sentaron posición en contra de las violaciones a los derechos humanos. El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, envió todo su apoyo al pueblo cubano y pidió que se respeten los derechos humanos.
Por su parte, María Eugenia Vidal dijo a Infobae que no se puede “desconocer” lo que está pasando en Cuba y remarcó que “menos en un país como el nuestro que aprendió con dolor la importancia de la libertad y del respeto a los derechos humanos”.
“¡Basta de doble discurso!”, concluyó la flamante precandidata a diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires.
En la misma línea, el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo, señaló que la movilización popular en Cuba “es el reflejo de una sociedad agotada por la falta de libertades”. “Oír a la ciudadanía es un valor fundamental que hace a la vida democrática. Admiro el coraje del pueblo cubano”, agregó.