Matías Napp, uno de los coach más conocidos del Bailando, expresó su bronca y su tristeza por el ataque a la bailarina Julieta Antón, quien además fue su novia durante el 2016, cuando él era parte del equipo de Fede Bal y Laurita Fernández.
“Día triste, difícil de digerir. Por suerte Juli y Sofi están bien, exigimos Justicia”, escribió el bailarín en una de las historias que compartió en su cuenta de Instagram y en la siguiente, hizo referencia al atacante, con una foto del agresor incluida: “Basta, lo queremos preso. Este forro se llama Sebastián Villarreal”.
Además de colegas, Matías y Julieta habían sido novios durante el 2016 cuando ella era una de las bailarinas del staff de ShowMatch. Como coach de Bal y Fernández, el ex de Flor Vigna había convocado a su por entonces novia a participar como invitada a uno de los ritmos.
Fue en la gala de precisión, que impulsada por Napp, Antón pudo mostrar su talento en la pista más famosa del país ante millones de espectadores. “Que baile Julieta y se mueren todos”, había adelantado él en su cuenta de Twitter, orgulloso de su pareja.
La joven bailarina de 22 años en ese momento se llevó los halagos del jurado, que destacaron lo bien que bailó el equipo completo: “Estuvieron increíbles, son los cuatro muy talentosos”. Polino les puso un ocho, pero cumpliendo su rol de “implacable”, les dijo: “Yo hubiera invitado a una bailarina de más experiencia, pero estuvo lindo”.
“No sabía que era tu novia la chica Anton, muy mona y gran bailarina”, la había elogiado Moria Casán. Además de ser compañeros en lo que en ese entonces era Idea del Sur, Napp habia sido profesor de baile de ella. Consultada por Tinelli, contó qué fue lo que más le gustó del coach: «Su personalidad, es muy compañero… había química”.
El martes por la tarde Julieta estaba dando clases en Club Danza, en el barrio de Belgrano, cuando ella y la dueña del lugar fueron atacadas por un hombre armado con un cuchillo. Se trataba de uno de sus alumnos, Sebastián Damián Villarreal, de 30 años, oriundo de Berisso. Según trascendió, el agresor estaba obsesionado con ella.
De inmediato Antón fue trasladada al hospital Pirovano cortes profundos en el brazo, otro no tan profundo en el cuero cabelludo y algunos cortes más en el resto del cuerpo.
Ayelén, amiga de Antón, contó a TN que Villarreal acosaba a la profesora desde hacía tiempo. “No eran pareja, nunca lo fueron. Él tenía una obsesión con ella, le escribía siempre, la ponía muy nerviosa”, afirmó la amiga. Y agregó: “Villarreal le mandaba fotos y videos bailando, ya que estaba obsesionado”.
“Julieta ya venía asustada, no pensó que iba a llegar a tanto. Es un alumno, un enfermo, un fan. La acosaba, tomaba sus clases virtuales”, contó a Infobae Delfina García Escudero, una amiga bailarina.
