Frente a más de 700 personas, Mauricio Macri presentó en el centro de convenciones de la ciudad de Buenos Aires su libro Primer Tiempo, en el que repasa sus cuatro años al frente del gobierno de la Argentina. En una pequeña introducción previa a que comience la conversación con Pablo Avelluto, ex ministro de Cultura que lo ayudó en la redacción de las memorias, el ex presidente envió un mensaje a la tropa de Juntos por el Cambio: “Somos el cambio o no somos nada, ese es nuestro motor”.
Y agregó: “Nosotros somos los que representamos a millones que tienen la convicción de que pueden ser mejores y aceptan el desafío de superarse. Ser el cambio significa trabajar en equipo, gestionar y siempre pensar para qué estamos acá”.
En sintonía con esto, Macri afirmó: “Sé que es un momento en que estamos focalizados en defender la república y las libertades. Busco que el aporte vaya a reivindicar esos dos pilares por lo que estamos acá: para ayudar a que la gente viva mejor, y el como que es aceptando desafiar al status quo”.
El ex jefe de Gobierno comenzó con una chicana al kirchnerismo: “Este es mi primer libro, pero estoy pensando en una zaga, entre tiempo, segundo tiempo, alargue, penales. Es que el kirchnerismo me hace tanta publicidad de mi libro que voy a hacer más”.
Rápidamente, el ex jefe de Estado se metió en la cuestión electoral y vaticinó un retorno de Juntos por el Cambio al poder en el 2023, acompañado de una autocrítica: “Lo bueno y lo malo es que el 2023 no va a tener nada que ver con el 2015. Este Gobierno que no hace más que profundizar la crisis económica y social va a llevar a un nivel de entendimiento en todos los argentinos que permitirán que, con mayor apoyo político por las elecciones del 2021 y el 2023, Juntos por el Cambio vuelva al poder con una enseñanza adquirida y de esa manera hacer el paquete global de reformas”.
Aquí, Macri volvió a arremeter contra el gobierno de Alberto Fernández: “El populismo trabaja sobre destruir el futuro para vivir el presente, y cuando terminan de fracasar, dejan tierra arrasada, pero esta vez es el final, porque este proceso de falsear la realidad, un día dicen una cosa y otro otra, es complejo luchar contra eso, genera una enorme confusión”.
“El kirchnerismo es una expresión final del populismo en Argentina, que va a entrar en una serie de 20 años de crecimiento racional y responsable. Lamento no haber encontrado el camino”, sentenció.
Asimismo, insistió en que hay que “subirse al cambio porque el cambio es inclusión y el populismo te predica que cualquier cosa que venga de afuera es el enemigo, pero hay que animarse profundamente a encarar este proceso de cambio, son muchos años de frustración, de un Estado fallido que no estuvo a la altura de generar más oportunidades para los argentinos” y advirtió que “seguir defendiendo los privilegios de pocos no va a llevar a mejores oportunidades a la mayoría de los argentinos”.