Mauricio Macri y María Eugenia Vidal cenaron en Villa La Angostura, la localidad del sur del país que ambos eligieron para descansar durante el fin de semana largo. Lo hicieron en compañía de sus hijos, de la primera dama, Juliana Awada, y de Nicolás Caputo, el más íntimo de los amigos del Presidente.
Macri llegó a la villa turística a última hora de la tarde del viernes junto a su mujer y Antonia, la hija de ambos. Pasaron el fin de semana en el country Cumelén, en la casa de Caputo. Vidal, por su parte, había arribado primero a Bariloche en la tarde del jueves, tras un almuerzo que compartió en sus oficinas porteñas con su equipo de campaña, algunos de los principales ministros bonaerenses y los consultores Jaime Durán Barba y Santiago Nieto.
La cena entre ambos, de la que no trascendieron demasiados detalles, se da una semana después de las elecciones primarias, en las que el Gobierno salió airoso en varias provincias del interior del país, y en medio de la polémica por las PASO de la provincia de Buenos Aires. A fines de esta semana se espera el escrutinio definitivo por parte de la Justicia Electoral, que determinará si se confirma la victoria de Esteban Bullrich o, por el contrario, de Cristina Kirchner.
La gobernadora sigue las cábalas. Después de las PASO del 2015, también había elegido el sur del país para descansar unos días junto a sus hijos. Mañana, tiene previsto recorrer obras en la localidad bonaerense de General Rodríguez.
El Presidente también aprovechó para recuperarse de la rodilla por la que fue operado por tercera vez ya que ahora deberá afrontar el segundo tramo de la campaña, que seguramente lo tendrá de protagonista en todo el país, con excepción del Conurbano, en donde la cara visible es Vidal.
Si bien aún no hay definiciones sobre los principales puntos de la campaña, si trascendió que habrá mucho anclaje en la obra pública y que el objetivo es minimizar el margen de error para captar a los votantes de otros candidatos, en especial de Sergio Massa. Hay un creciente optimismo en el oficialismo por el resultado del domingo en municipios de la primera y la tercera sección electoral, claves en territorio bonaerense. En el Gobierno admiten que no hay lugar para equivocaciones.
