Con una importante concurrencia se desarrolló el Encuentro Bandeño Juvenil (EBAJ) con el lema «No podemos callar lo que hemos visto y oído».
Luego de dos años, los jóvenes bandeños tuvieron su reencuentro en la Capilla Santa Rita donde compartieron la Palabra de Dios.
Las actividdaes se iniciaron en la mañana, donde los diferentes grupos abordaron como temas principales el «Kerigma», un anuncio para todos los jóvenes; luego Discípulos y amigos; para concluir con la Misión, para ir y transmitir la Palabra a otros jvenes.n diálogo con LA BANDA DIARIO el padre Gastón Cuello señaló: «Es una alegría inmensa poder compartir con este grupo de jóvenes que tendrán de labor llevar esta experiencia a las parroquia, capillas. Lo que han visto, han oído, debe ser transmitido, compartido hacerlo vida. En este mes misionero hemos elegido el lema ‘No podemos callar lo que hemos visto y oído’, o sea el amor de Jesús que se ha derramado sobre nosotros lo debemos compartir con aquellos hermanos que tanto necesitan; porque son muchos más los que no han experimentado ese amor».
Sobre este reencuentro ampliamente esperado mientras transcurría la pandemia, el sacerdote destacó: «Fue muy lindo ver las caras de alegría, sonrisas, miradas cómplices, algún que otro abrazo que antes era natural y hoy no lo podíamos hacer. Aún así, es diferente a la virtualidad, Jesús se ha hecho presente y eso nos ayuda a nosotros a vivir de una manera distinta. Fue muy especial para los jóvenes que están transitado un mismo camino, para los animadores que son quienes los van guiando, y sobre todo para los sacerdotes de La Banda que nos unimos en este encuentro».
Misa central
Fue el Obispo Vicente Bokalíc quien presidió la Santa Misa, junto a los padres Gastón Cuello y Francisco Barrientos. «Están llamados a llevar la buena noticia, porque hay muchos chicos que necesitan experimentar que Jesús es Vida», subrayó el prelado.
En un clima de emoción y alegría, el obispo destacó que, «estamos comenzando a normalizar las actividades, pero hay que tener presente que aún no ha terminado la pandemia y no nos olvidamos de todo lo que hemos vivido. Hoy celebramos el volvernos a encontrar y asumimos el compromiso de ser transmisores de la Palabra».
«Estamos llamados a llevar la buena noticia porque hay muchos chicos que necesitan experimentar que Jesús es Vida. Él cuenta con nosotros, con esas ganas de reencontrarse y sentirse bien; entonces si esto nos da alegría salgamos como la samaritana a contar, no podemos callar que ese amor verdadero nos cambia. Habrá quien nos quiera silenciar con la indeferencia, pero no debemos tener miedo de decir lo que tenemos en el corazón», explicó Bokalic.
Finalmente elevó su oración para que este encuentro sea multiplicador y muchos jóvenes encuentren el camino, para dejar atrás la tristeza y soledad en la que se encuentran.
El Encuentro Bandeño Juvenil finalizó con una Cristoteca donde los participantes cantaron y bailaron agradeciendo la oportunidad de reunirse nuevamente.
