Los movimientos de izquierda y las organizaciones sociales decidieron profundizar su plan de lucha en rechazo a las políticas económicas del gobierno de Mauricio Macri, con una serie de medidas que volverá a incrementar los niveles de conflictividad en la calle.
En una conferencia de prensa que se realizó al pie del Obelisco, referentes del Polo Obrero anunciaron que el martes 24, desde el mediodía y hasta la tarde, realizarán una jornada de protesta con piquetes en rutas y calles de la Capital Federal y de 20 provincias de la Argentina.
«No podemos esperar el proceso político-electoral que se desarrolla. Estamos en la calle por las necesidades elementales e impostergables de los trabajadores, no porque tenemos ganas de molestar el tránsito», aclararon este mediodía en el centro porteño. Allí apuntaron que también se aprobó realizar un acampe de 72 horas, aunque aún no se definió la fecha.
El activista de izquierda, Oscar Kuperman fue uno de los oradores y aprovechó para cuestionar «la acción represiva de un gobierno que está en retirada».
«No somos subversivos, somos desocupados, que lo entiendan el Gobierno y esta ministra (Patricia Bullrich) que pasa de canal en canal con amenazas de que nos va a procesar», apuntó el mismo dirigente, antes de anunciar que este viernes 20 se movilizarán desde el Obelisco a Tribunales, en apoyo a sindicalistas de la línea 60 que están procesados.
Los organizadores explicaron que impulsan una acción de lucha común de ocupados y desocupados que reclaman «aumento de salarios, apertura de paritarias e incremento para los jubilados».
Ese pedido se suma al reclamo de base de las organizaciones sociales, que exigen apertura de programas sociales y el aumento y la efectiva asistencia de los comedores populares.
«El Gobierno tiene que dar soluciones, si eso no ocurre, estaremos nuevamente con miles de compañeros en la calle», prometieron.