La presidente aseveró que «no se trata de enfriar la economía sino de recalentar la inversión» a la vez que definió como “relación estratégica, con impacto regional” a la de Argentina con Brasil.
La jefa del Estado argentino, asimismo, consideró que hay que «trabajar mucho sobre la articulación de los sectores privados de ambos países, porque no puede haber incompatibilidades y estamos en condiciones de ganar».
«El crecimiento de Argentina no tiene que ser visto como una amenaza por ningún empresario brasileño», continuó la presidente.
La mandataria formuló estas declaraciones en Brasilia, luego de reunirse con su par local, Dilma Rousseff, en el Palacio de Planalto, sede del gobierno de ese país.
Por la tarde, Cristina Kirchner inaugurará oficialmente la nueva embajada argentina en la capital brasileña.
Fuente: Infobae