Lima.
Los jóvenes saltan de las combis e invitan con gritos y gestos a subirse, voceando en las esquinas los destinos que el pequeño vehículo de transporte tocará en la capital y sus alrededores. Los bocinazos de los taxistas buscan algún turista deseoso de perderse bajo los balcones de madera del centro histórico. El cielo se disimula por las nubes o la densa niebla que, en algún momento del día, empuja hacia esta ciudad el Océano Pacífico.
Lima despertó en la víspera de la crucial elección de mañana con los mismos interrogantes, las mismas apasionadas caricaturizaciones de los candidatos “del otro bando”, pero con la ansiedad y las pulsaciones aceleradas a medida que se acerca la hora de votar.
“Hay plan para liberar a Fujimori”, disparó desde su portada de hoy el diario La República, haciéndose eco de una denuncia de expertos penalistas que acusan de parcialidad al Tribunal Constitucional, que estaría aguardando una posible victoria de la hija del ex presidente preso por corrupción y crímenes de lesa humanidad (Keiko) para revisar la situación de quien gobernó este país entre 1990 y 2000.
“La red de los petrodólares; así llegaba el dinero chavista a Ollanta Humala”, replica en su tapa el diario Perú 21, haciéndose eco de una denuncia lanzada anteayer por el ex agente de la CIA y funcionario de la administración Bush, además de probada militancia antichavista y anticastrista, Roger Noriega.
El fin de las campañas del jueves en la noche no supuso la conclusión de las actividades proselitistas, seguidas anoche de manera encubierta por algunos medios, como una radio cuyo conductor sugería no temer votar por el candidato de Gana Perú, o sin disimulo alguno, como hizo un canal del grupo Comercio que, en cada corte comercial del programa periodístico La Hora, repetía una y otra vez un mensaje del economista Pedro Pablo Kuczynski, tercero en la primera vuelta del 10 de abril, reclamando el voto para la hija de Fujimori.
El ex ministro, en un tono monocorde y mirando a cámara agitaba toda suerte de fantasmas sobre el candidato nacionalista: “Ollanta Humala es el militarismo estatista y abusivo que ha fracasado en Venezuela generando pobreza e inflación”, sostenía PPK en plena veda y como una letanía que hacía difícil de entender cómo este candidato sedujo a tantos jóvenes a través de las redes sociales en el primer turno.
Y hablando de redes sociales, desde Gana Perú, la fuerza que impulsa al nacionalista, se denunció en las últimas horas que su sitio web fue “clonado” y que hay mensajes que simulan la voz del ex militar para tergiversar su propuesta y confundir a electores que aún no han decidido su sufragio para mañana. ¿Aún habrá indecisos? No parece. Más bien están los que callan su voto según sea el ámbito en el que se encuentren.
“Yo voy a votar por Fujimori porque ese militar está loco y aquí la gente tiene miedo”, dice Marta, en su puesto de venta de diarios junto a la calle Alcanfores. “El otro día vinieron y me hicieron garabatos sobre los diarios en los que aparecía la cara de Keiko, porque según ellos no había mostrado los que tenían notas a favor de Humala… ¡Y yo de este lado del kiosco pongo los diarios creíbles y del otro, los más populares!”, alega casi a los gritos la vendedora, con una selectividad que atribuye a estrategias del marketing.
“La Primera”, pide un muchacho y entrega a cambio un sol, para salir con su diario en la mano y en silencio. La portada del periódico reza: “Mañana es el ‘Día D’. A vencer el miedo”. Unos pasos más allá, este enviado lo aborda y lo consulta por su voto de mañana. “Por Ollanta, está claro. Él ha prometido cosas para los pobres, un salario digno y fortalecer los sindicatos”, dice Carlos, quien llegó bien temprano desde El Cercado a la obra en la que trabaja como albañil junto a la avenida José Larco.
Lima, como Perú todo, consumen las últimas horas previas a la elección del gobernante que asumirá el 28 de julio por cinco años. La Casa de Pizarro, frente a la plaza, espera saber quién será el sucesor de Alan Gabriel García Pérez.
Fuente: La Voz del Interior
