Gracias a la enorme oferta televisiva infantil que existe hoy en día, los chicos cuentan con inagotables opciones para entretener sus ratos libres. Sin embargo, muchas de ellas no utilizan el vocabulario habitual de los argentinos, debido a que, por lo general, los doblajes de los personajes se hacen en México o España, por ejemplo. Esto hace que las expresiones de sus ídolos televisivos hablen en un español neutro, que los chicos copian, luego repiten y finalmente adoptan. Así, suelen escucharse de boca de los propios niños frases como “hazme un pastel”, “cállate”, “vete de aquí” o que le llamen «balón» a la pelota. Muchas de esas expresiones son tomadas de programas emitidos por canales como Discovery Kids, Disney Chanel, o Cartoon Network, todos con programación que apunta a la comunidad hispanoamericana toda. La excepción a la media se encuentra en Paka Paka, el único canal con contenido especialmente hecho para chicos de Argentina.
Los especialistas hablan de este fenómeno como el de la “generación malvavisco”, en alusión a las típicas golosinas norteamericanas.
En una nota publicada hoy por un matutino porteño, se destacan sin embargo las opiniones de diversos especialistas que no ven con tan malos ojos esta tendencia. Una de ellas es la psicopedagoga Andrea Kejek, quien considera que esta situación “aporta y suma a lo largo del aprendizaje de la primera infancia y de toda la vida”.
Por otra parte, Guiomar Elena Ciapuscio, profesora titular de Lingüística en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, coincide con la posición de Kejek.
“El hecho de que los niños estén expuestos a distintas variedades del español es beneficioso porque, de este modo, amplían su competencia lingüística, enriquecen su vocabulario, aprenden las diferencias tónicas, fonéticas, morfosintácticas y todo esto les permite familiarizarse con la diversidad que caracteriza a su propia lengua”, opina Y agrega: “Lo que llamamos español ‘neutro’, fruto de los doblajes en los medios de comunicación, es del todo discutible”
El español es una lengua pluricéntrica que varía en cada región según sus normas y costumbres. No se habla de igual modo, por ejemplo, en Buenos Aires, Madrid, o Lima. Si bien todos hablan español, cada lugar determina ciertos usos estándares de la lengua que son percibidos por los hablantes como adecuados y correctos.
Para la doctora Kijek, esta situación es beneficiosa para los menores por que de esa manera “aprenden que una misma cosa puede ser nombrada de diferentes maneras. Lo importante es que tengan, como respaldo, una explicación de adultos y maestros”.