Por otro lado, más allá del chiste, Liza también aclaró: «¡Estoy bien! No pasa nada». Esto es porque su caída no fue tan grave, sino que simplemente se resbaló porque las plataformas que llevaba puesta se enredaron con la inmensa cola de su vestido rojo y cayó al suelo de espaldas, pero riéndose.
De hecho, fue tal el humor con el que se tomó su caída que, cuando logró ponerse en pie, se acomodó y siguió como si nada. Eso sí, también agradeció a quiénes la ayudaron para pararse y poder llegar a su asiento en los Premios Oscar 2024.
Fuente MinutoUno