En reunión de Gabinete, Mauricio Macri respaldó al ministro que les pidió a los empresarios que «dejen de llorar»

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En la primer reunión de Gabinete del mes, Francisco Cabrera, ministro de la Producción, explicó que sus punzantes palabras sobre los empresarios, a quienes les dijo en Mendoza que «dejen de llorar» fueron sacadas de un contexto más amplio, pero Mauricio Macri salió a respaldarlo inmediatamente y dijo, ante todos, que «a mí me encantó lo que dijiste».

Cabrera fue recriminado por algunos de sus pares, ya que fueron muchos los industriales que llamaron a funcionarios para criticar ese comentario, por eso quiso explicarse. Sin embargo, el Presidente dijo que «(Guillermo) Moreno le rompió la cabeza a estos tipos y no decían nada».

Se trató de una reunión de solo una hora, porque se esperaba la llegada de los reyes de Noruega y había que preparar la recepción y las palabras que en público y en privado daría  Macri, pero alcanzó para que los ministros del Gobierno nacional pudieran seguir la larga marcha de una economía en crecimiento lento, para muchos todavía invisible.

«La situación económica sigue bien, se está creciendo a buen ritmo, ya que en enero el crecimiento interanual fue cercano a 3% y en febrero estará entre 3.5 y 4%», aseguró el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, otro de los funcionarios que hablaron hoy en  Gabinete. Y se mostró confiado en que no hay nubes en el camino, ni razones para temer que una disparada del dólar o de la inflación, que empezará a moderarse a partir de marzo.

El encuentro de ministros arrancó con la palabra del de Educación, Alejandro Finocchiaro. Dio un panorama optimista, asegurando que -aunque los cálculos todavía no están- el grado de acatamiento al paro es menor que el del año pasado, y seguirá bajando con el correr de los días y el debate público.

«La mayoría de los docentes de todo el país está dando clase, los que paran son minoría, y cada vez les resulta más difícil explicar por qué algunos chicos tienen clases y otros no», dijo Finocchiaro.

Inmediatamente después el ministro Luis Miguel Etchevehere pasó revista a la situación de la sequía, preocupante si en la próxima semana no llueve en la zona núcleo, lo que no está pronosticado.

Patricia Bullrich, por su lado, informó del despliegue de la Gendarmería Nacional hacia Río Turbio, un movimiento que despertó inquietud en la provincia de Santa Cruz, pero que fue abortado ante el inicio de negociaciones entre la empresa y los contratados, que resisten a quedarse sin empleo.

También informó sobre el juicio en Bariloche que ayer resolvió la extradición de Facundo Jones Huala, y que provocó incidentes frente al juzgado, que rápidamente fueron controlados.

En ese momento, el Presidente preguntó qué se sabía de la situación judicial de Sergio Apablaza Guerra, ex integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, cuya extradición viene solicitando el gobierno de Chile hace varios años porque está acusado de haber asesinado en 1991 al senador pinochetista Jaime Guzmán.

Macri se comprometió a fines de 2016 con Michele Bachelet que seguiría el caso, y ella dejará el poder y aún la causa «sigue en trámite», según le dijo el ministro Germán Garavano.

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