Pasadas las 20 horas, el juez Emilio Stadler emitió un comunicado para ampliar la información sobre el deceso del gobernador de la provincia, Carlos Soria, ocurrido en la madrugada del primero de enero.
El informe detalló que el mandatario fue «víctima de un solo disparo» proveniente de un arma de fuego de su propiedad, «que fue encontrada y secuestrada en la escena». El hecho, según se informó, ocurrió en «el interior de la habitación matrimonial» que ocupaban Soria y su esposa, Susana Freydoz.
Si bien en la chacra de General Roca se encontraban también «una de sus hijas y el novio de esta«, el comunicado aclara que «ningún elemento probatorio, ni siquiera indiciario, permite sospechar que pudiese haber intervenido en el hecho alguna otra persona ajena a las ya mencionadas».
De todos modos, el magistrado aclaró: «Por el momento no es posible informar a la opinión pública sobre las circunstancias que desencadenaron el hecho, así como tampoco sobre eventuales responsabilidades penales, lo que se habrá de analizar con la premura que el caso requiere en las próximas horas».
Por la tarde, la provincia de Río Negro había emitido también una circular para informar que el «deceso se produjo presumiblemente producto de un accidente doméstico, debido a la manipulación de un arma de fuego«.
También se reportó que “el martes a las 12 se realizará una reunión de gabinete en Casa de Gobierno donde participarán legisladores e intendentes del Frente para la Victoria, mientras que a las 18 en la Legislatura asumirá como gobernador Alberto Weretilneck, de acuerdo a lo establecido por la constitución provincial”.
Por el hecho, Susana Freydoz, esposa del mandatario, se presentó a las 9:45 en los tribunales ante el juez Stadler. Al respecto, el magistrado aclaró en su comunicado que la mujer «ha sido examinada» pero que «hasta el momento no se le ha recepcionado ningún tipo de declaración«.
Tras entregar muestras de sangre y realizarse un Dermotest (prueba para comprobar si disparo el arma que causó el fallecimiento), Freydoz se retiró del lugar. Según informa el Diario de Río Negro, «hasta el momento su situación ante la justicia no reviste calidad de imputada ni sospechosa«.
El deceso de Soria ocurrió esta madrugada en la residencia privada del mandatario, una chacra en las afueras de la ciudad de General Roca, de la que fue intendente hasta el 9 de diciembre último.
El mandatario provincial recibió un tiro en su rostro y fue trasladado con vida hacia un hospital zonal donde falleció a las 4:47. «El gobernador recibió un tiro en su residencia particular, en las afueras de Roca«, había confirmado el secretario de Información y Coordinación provincial, Julián Goinhex.
Cuando llegaron a la residencia los médicos y los efectivos de la Policía provincial, Soria se encontraba en su cama matrimonial con el cuerpo semidesnudo y totalmente ensangrentado, pero aún con signos vitales.
El mandatario recibió un disparo de arma de fuego (que sería un calibre 38) en uno de sus ojos, lo que le produjo una hemorragia que no pudo ser contenida por los médicos y le provocó la muerte.
Al respecto, el diario Río Negro indica que el hecho se habría producido luego de una fuerte discusión que Soria mantuvo con su esposa.
Los restos mortales no fueron velados por decisión de su familia, por lo que ya se lo trasladó al cementerio privado Parque Las Fuentes.
El 26 de septiembre pasado, Carlos Soria se había convertido en el gobernador de la provincia con cerca del 50% de los votos. El candidato del Frente parala Victoriafue seguido por el también kirchnerista César Barbeito.
Tras 28 años de gobierno radical –pese a que en los últimos años fue un radicalismo K–, Soria, que fue también intendente de General Roca (la segunda localidad más importante de la provincia), había roto la racha en la provincia y cosechado un nuevo triunfo para el oficialismo nacional.
Fuente: Infobae