Tras unas semanas de vacaciones en Miami, Susana Giménez volvió a su mansión “La Mary” en Punta del Este, donde se espera que pase el resto del verano. El recibimiento, a cargo de sus perros, fue más que especial y los animales no pudieron ocultar su alegría al ver a la diva llegar en su camioneta.
Tal fue la euforia, que a Susana le resultó bastante complicado descender de su propio auto ante los saltos y ladridos de sus perros. “¡Me lastiman! No sean así. ¡Basta! Auuu Beto, Kiko mi vida… ¡Ay! No me muerdas, ¡basta! Ahora vamos a caminar…”, se la escucha gritar a Susana Giménez mientras intenta alejar a las mascotas de la puerta del vehículo para poder bajarse.
En uno de los intentos, su empleada Nancy le alcanza unas alpargatas para que esté más cómoda y Susana no pudo evitar mencionar: “¡Con los tacos me tiran a la mierda!”.
Los gritos de la conductora, que inició el verano con una polémica, no pararon hasta que –como mostró en sus historias de Instagram- pudo bajarse y sacar a pasear a los perritos por su chacra de Punta del Este.
“El secreto está en no bajarse de la camioneta hasta que se calmen y después llevarlos a pasear (ya lo tengo todo estudiado)”, comentó Susana Giménez al pie del gracioso video que compartió en su perfil de Instagram desde Punta del Este y que fue muy bien recibido por sus seguidores.
Los encuentros que comparte Susana con los animales son desopilantes. La diva parece maravillarse con cada actitud que toman. Hace algunos días, mientras se encontraba de vacaciones con su hija Mecha Sarrabayrouse en Miami, tuvieron un encuentro cercano con una pequeña iguana: “Se tira al mar, me muero, se ahoga, es muy chiquito. ¡Mirá qué cola larga tiene! ¡Mecha!”.
