Ucrania atacó esta madrugada con drones una refinería de la región de Riazán, en el oeste de la Federación Rusa, informaron fuentes de la inteligencia militar ucraniana (GUR) a medios ucranianos.
“El objetivo militar en Riazán fue alcanzado. Hay daños importantes”, dijo una de esas fuentes a la publicación Ukrainska Pravda. Otros medios como la agencia pública de noticias ucraniana, Ukrinform, también han informado del ataque citando fuentes del propio GUR.
Esta ola de ataques ucranianos con drones contra refinerías de combustible rusas ha provocado tensiones entre Ucrania y Estados Unidos, que ha pedido a Kiev que no continúe con estas acciones por miedo a que provoquen una escalada por parte de Rusia y hagan subir los precios del combustible a nivel internacional.
Esta acción ucraniana se dio luego de que este martes Kiev informara que tiene previsto destinar otros 392 millones de dólares a la compra de drones para contrarrestar la invasión rusa.
Así lo ha decretado el primer ministro del país, Denis Shmigal, quien señaló que previamente se habían asignado más de 1.000 millones de dólares para la compra de aviones no tripulados a lo largo de este año.
“Con todos estos fondos, se suministrarán 300.000 drones a nuestras Fuerzas Armadas”, dijo la autoridad tras una reunión del Gabinete, según un comunicado difundido a través de su cuenta en la plataforma de mensajería Telegram.
Estos fondos serán transferidos a la administración de la Agencia Estatal de Comunicaciones Especiales, que se encarga de la adquisición de drones, según ha explicado.
Ya en diciembre de 2023, la jefa del Centro de Apoyo de Aeronteligencia de Ucrania, Maria Berlinskaya, había mencionado que las fuerzas ucranianas se verían obligadas a retirarse si las autoridades no gestionaban la obtención o fabricación de drones de ataque.
En este sentido, afirmó que la mayor parte del material ucraniano es destruido por drones rusos, cuya producción sigue en auge. Las autoridades han resaltado así el papel “decisivo” de este tipo de aeronaves en operaciones realizadas durante los combates.
Progresos de cara a un canje de prisioneros
El secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, reveló este martes que se han dado progresos de cara a un intercambio de prisioneros entre Rusia y Ucrania, que había sido solicitado por el papa Francisco, aunque evitó brindar detalles sobre estas gestiones.
“No puedo dar elementos precisos pero, por lo que he oído, ya ha habido movimientos en este sentido. Así, pues, el llamamiento del Papa ha sido acogido y se ha actuado en consecuencia”, comenzó diciendo Parolin en diálogo con el diario Avvenire, antes de señalar que “lo tomamos como una señal positiva porque creemos que todos los esfuerzos realizados el año pasado por el cardenal Matteo Zuppi durante la misión que le confió el Papa fueron de gran valor”.
Casi un año atrás, el 20 de mayo de 2023, Francisco anunció la conformación de una comitiva por la paz encabezada por el Cardenal, cuya tarea era “ayudar a aliviar las tensiones en el conflicto de Ucrania, con la esperanza nunca renunciada por el Santo Padre, de que esto pueda poner en marcha muchos caminos de paz”.
Posteriormente, el 31 de marzo de este año, el Sumo Pontífice reiteró su compromiso asumido entonces, de mediar entre las partes y conseguir un alto el fuego. “Que Cristo resucitado abra un camino de paz para las poblaciones atormentadas de esas regiones. Mientras pido que se respeten los principios del derecho internacional, espero un intercambio general de todos los prisioneros entre Rusia y Ucrania”, dijo durante su Mensaje de Pascua Urbi et Orbi.
También, el 17 de abril, durante una audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano, retomó el tema y dijo: “Nuestro pensamiento en este momento, de todos nosotros, está con las poblaciones en guerra. Pensemos en Tierra Santa, Palestina, Israel. Pensemos en Ucrania, en la martirizada Ucrania. Pensemos en los prisioneros de guerra: que el Señor mueva la voluntad para liberarlos a todos”.
Al respecto, durante su entrevista, Parolin explicó que esta atención al costado humanitario de la guerra -que incluye no sólo a los privados de su libertad sino también a los miles de niños que han sido separados de sus familias y deportados hacia Rusia, dados en adopción- es el que puede crear las condiciones para que se abran canales de negociaciones que conduzcan al “fin de la guerra”.
(Con información de agencias)
Fuente Infobae