Durante el 2021, solo tres de cada diez empresas consultadas prevé aumentar su dotación de personal, pero otro 20% lo prevé reducir, según un sondeo privado. En tanto, el 65% de las empresas consultadas admitió que terminan el año con “preocupación, incertidumbre y problemas económicos”.
De acuerdo con un relevamiento de la compañía de recursos humanos Adecco Argentina, más de la mitad (54%), proyecta mantener la dotación. Al 26% que incrementará su personal se le consultó en qué porcentaje lo harán: el 60% afirmó que será dentro de un 10%, el 21% de entre 10% y 20%, y 19% entre 20% y 30 por ciento.
Consultadas sobre cómo terminan el año de la pandemia, un 43% de las empresas dijo que lo hará de manera estable, el 30% con incertidumbre, el 25% con preocupación y el 11% con problemas económicos.
En tanto, el 53% de las empresas encuestadas afirmó que la pandemia afectó negativamente la facturación.
Sobre los aumentos salariales, casi 9 de cada 10 empresas prevén otorgar subas durante 2021, que variarán entre 15% de mínimo y 40% de máximo.
Según el relevamiento, que abarcó a 203 empresas, entre los requisitos más solicitados por las empresas a la hora de contratar personal figuran la experiencia (60%), que tengan título universitario o terciario (49%), que valoran las habilidades blandas (49%), el manejo de herramientas informáticas (36%) e idiomas (23%), y que vivan cerca del lugar de trabajo (25%).
Asimismo, destacó que los puestos más solicitados serán los operativos y de producción (47%), seguido por los de marketing y ventas (24%), tecnológicos (20%), administrativos (12%), y en menor medida, los financieros y contables (10%), y los directivos y gerenciales (5%).
Durante la pandemia, la pérdida de empleos afectó en particular al sector informal
Casi 4 millones de trabajadores perdieron sus empleos desde que comenzó la pandemia, de los cuales más de la mitad pertenecía al sector informal, según un informe elaborado por el Centro de Investigación y Formación de la CTA (Cifra).
El trabajo relevó que 56,6% de los puestos perdidos afectó a asalariados no registrados; 39,6%, no asalariados; y 3,8% a asalariados registrados, en una situación del mercado laboral inédita por las medidas adoptadas ante la pandemia y su consecuencia en la actividad económica.
El reporte cita que de acuerdo con información correspondiente al segundo trimestre del año de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) proyectada a nivel nacional, la caída en la cantidad de empleo se acercó a los 4 millones de trabajadores.
Según esa conformación, la rápida reducción en los asalariados no registrados alcanzó a los 2,3 millones y en los no asalariados a 1,6 millones, mientras que los asalariados registrados pudieron estar relativamente más protegidos por una mayor regulación estatal.
“Esta fuerte reducción se explica prácticamente en su totalidad por la disminución del número de asalariados no registrados y de ocupados no asalariados, ya sean patrones y trabajadores por cuenta propia”, indicó el informe, al destacar que “la importancia de la protección que la regulación de las relaciones laborales puede implicar para los trabajadores”.
El estudio aseguró que “la caída fue menor para los asalariados registrados debido a la prohibición de despidos aunada a la vigencia del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP)” que implementó el Gobierno nacional a poco de decretar el aislamiento obligatorio.
En 2020, no había llegado a iniciar su recuperación cuando la disminución se volvió más fuerte, como consecuencia de la pandemia
Así, mientras que entre los dos primeros trimestres del año (antes y después de la pandemia), el total de ocupados cayó 20,7%, estas tasas de caída fueron muy diferentes para las distintas categorías ocupacionales.
En el análisis particular del empleo registrado, tanto de los asalariados registrados como de aquellas categorías de trabajadores independientes que realiza aportes a la seguridad social, se destacó que “la creación de empleo registrado se desaceleró durante el gobierno de Cambiemos y directamente se redujo desde 2019”.
“En 2020, no había llegado a iniciar su recuperación cuando la disminución se volvió más fuerte, como consecuencia de la pandemia”, advirtió el informe.
A septiembre, aunque es el primer mes del año que muestra una mínima recuperación, se perdieron casi 220.000 empleos registrados respecto de diciembre de 2019, es decir, una caída de 1,8 por ciento.
Esta reducción se explica principalmente por la disminución en 201.000 en el número de asalariados del sector privado (-3,4%) mientras que también los asalariados del régimen de casas particulares tuvieron una reducción de magnitud: -4,7% que representa 23.500 trabajadoras menos.
Los asalariados del sector público se mantuvieron prácticamente constantes en los meses relevados por el informe.
Daniel Blanco Gómez/Infobae