La localidad de Monte Maíz (Córdoba) estaba preparada para vivir una fiesta con la presentación de Banda XXI, una de las bandas más populares de la provincia. Sin embargo, la celebración terminó de manera abrupta y sólo por un milagro no sucedió una tragedia.
Unas 4.000 personas esperaban ansiosas el show del grupo cuartetero, pero se vieron sorprendidas cuando una ráfaga de viento provocó la caída de la parrilla de luces. En el momento del derrumbe, los gritos de la gente fueron instantáneos porque la escena hizo pensar en lo peor.
«Lo último que recuerdo es cuando se viene la ráfaga de viento y la lona cae tirando al manager hacia adelante, después me desperté en el Hospital», dijo el cantante del grupo a Radio Línea.
«La verdad, que tuve mucha suerte. Estoy con un cuello ortopédico y me tengo que hacer una resonancia; estoy un poco dolorido sobre todo en la cervical y eso genera un poco de mareo», agregó Maneio.
Los únicos que resultaron heridos fueron el cantante y el manager de la banda, que sufrió golpes en el rostro al caer sobre los instrumentos del grupo. En cuanto a los daños materiales, se rompieron la batería y la timbaleta, y un teclado se partió al medio.
Más allá del susto, los organizadores del show aseguraron que «Banda XXI nos dijo que quiere revancha y nos pidió que armemos otro espectáculo para venir a Monte Maíz».