El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia condenó a Martín Báez, uno de los hijos del empresario Lázaro Báez, a dos años y tres meses de prisión por la “retención indebida de aportes previsionales” de trabajadores en relación de dependencia de la empresa Kank y Costilla.
La defensa de Martín Báez pidió que la pena sea considerada “cumplida”, en virtud del tiempo que pasó detenido en otro expediente, la causa por presunto lavado de activos provenientes de la supuesta corrupción en la obra pública de Santa Cruz.
Martín Báez fue condenado por “apropiación indebida de recursos de la Seguridad Social» durante el año 2013, en pleno apogeo de Grupo Austral.
La pena fue sensiblemente menor al máximo previsto por ley para ese tipo de delitos, que trepa hasta los seis años de cárcel.
Para determinar el monto de la condena, el Tribunal Oral consideró que Martín Báez se había acogido a una moratoria y había comenzado a pagar la deuda previsional.
La defensa de Martín Báez subrayó que el imputado “tuvo voluntad para cancelar la deuda” pero no pudo hacerlo porque sufrió una inhibición general de bienes en la causa por lavado, en la que finalmente terminó condenado junto con su padre.
El tribunal consideró que el delito había sido cometido: “se apropió indebidamente de sumas de dinero retenidas a sus empleados en relación de dependencia, en conceptos de aportes de la seguridad social”.
Sobre el pedido de dar por cumplida la pena, el tribunal difirió la decisión para el momento en que la pena quede firme.