La canasta básica total (CBT), por la que el INDEC mide el umbral de la pobreza, aumentó en agosto 7,6%, por lo que, para no ser considerada pobre, una familia de cuatro integrantes (dos adultos y dos menores) necesitó $119.757 para no caer bajo esa condición. En tanto, la canasta básica alimentaria (CBA), que establece la línea de la indigencia, marcó que esa misma familia requiere de $52.990 para cubrir sus necesidades básicas para subsistir.
La CBT que comprende alimentos y otros bienes y servicios básicos como la vivienda, ascendió a $38.756 mensuales por persona en agosto, mientras que la línea de indigencia -que incluye la cobertura alimenticia imprescindible- se ubicó en $17.149.
Según cifras del INDEC, la canasta básica alimentaria se incrementó un 7,1% mientras que la canasta básica total subió 7,6% con respecto a julio. Sin embargo, si la medición se realiza de forma interanual, la CBT se incrementó 75,2%, mientras que la CBA subió 81,4%.
Las variaciones se ubicaron por encima del índice de precios, que para agosto, cuando la inflación llegó al 7%, informó el INDEC. Con ese dato, la escalada de precios suma 78,5% en los últimos 12 meses, la mayor cifra desde fines de 1991. En tanto, en los primeros ocho meses de 2022, el acumulado llega a 56,4%, también un máximo en 31 años.
Con respecto a los ingresos familiares necesarios para superar la línea de pobreza, el INDEC señaló:
Un hogar de tres personas requirió $95.340 en agosto para no ser pobre.
Una familia de cuatro integrantes necesitó un ingreso mínimo de $119.757.
Para cinco integrantes, el hogar debió sumar ingresos por al menos $125.958.
Por su parte, los ingresos familiares requeridos para superar la línea indigencia fueron:
De $42.186 para una familia de tres miembros.
Ascendieron a $52.990 en los hogares de cuatro integrantes.
Llegaron a $55.734 si conviven cinco personas.
Fuiente: tn